LA TRISTE VERDAD DEL DÍA DE LAS MADRES EN VENEZUELA.

El día de hoy se celebra el día de las madres en Venezuela y siento ver como por motivos de fuerza mayor familias se han visto en la necesidad de separarse y es triste ver como muchos esta fuera del país no están felices al estar lejos me lleno de nostalgia al ver como mi país se ve cada vez peor. Ningún venezolano que este fuera debe estar alegre al no tener a su madre y compartir junto a ella y mucho menos una madre venezolana están feliz al saber que no tiene a su hijo cerca.

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No soy de involucrarme en temas políticos porque somos personas lo suficiente maduras para para tomar decisiones y las consecuencias que dichas acciones traen. Pero como madre me invade la nostalgia de ver madres e hijos distanciados, muchos en busca de un futuro, otros para ayudar a su familia e innumerables razones pero creo que ninguna justifica el hecho de estar lejos por cosas así.
Sé que el día de la madre es todos los días, no solo un día que fue dado para ellas como efeméride, quizás no muchos compartan mi opinión y es entendible cada persona es libre de opinar y expresarse de las mejor manera que le parezca siempre y cuando sea con el debido de respeto, soy consciente de lo que digo mas no de lo que los demás puedan llegar a entender.

Como madres nuestro deber es cuidar y amar a nuestros hijos sin importar siempre y cuando sea por su bienestar, guiando sus pasos hasta que no sea permitido. Ser madre no es una tarea fácil pero sí que es gratificante ver como con el pasar del tiempo cada trasnocho, dolores, malestar se ven reflejados en frutos y en muchas satisfacción de que estás haciendo todo bien.

Dios nos dio el poder de dar vida y traer a personas maravillosas al mundo, la juventud de hoy en día es el futuro del mundo pero he visto como las cosas se ponen más difíciles a los jóvenes venezolanos en el país, y es que les han quitado tanto obligándolos a crecer rápidamente y a trabajar porque el dinero no es suficiente para poder estudiar, vivir. Como es posible que vivamos en un mundo donde vemos a los niños abandonar la escuela por no tener ropa, no tener para comprar un lápiz y mucho menos un cuaderno.

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¡Me duele mi país! Me duele ver a madres llorar porque su salario no les alcanza para darle un plato de comida a sus hijos es injusto que tengas que tener mucho más de 10 millones semanales para tener algo en la mesa que los niños coman, cuando un salario en Venezuela con el nuevo aumento es de 2 millones mensuales, donde un kilo de carne no es suficiente para un una semana y tienes que esperar un mes para obtener una cantidad que al momento de cobrarla es nada.

En Venezuela existe mucha gente trabajadora que se mata trabajando para dar de comer a sus hijos y no les alcanza y siento que hablo por la mayoría cuando digo que es in justo ver niños llorar por no tener que comer, ya que ellos no entienden el sindicado no hay comida, o espera mientras consigo algo, para mí el hambre no es un juego.

Soy madre de dos hijos y estoy feliz de tenerlos siempre me piden que les cuente como era todo en Venezuela en su mi tiempo, y mi hijo mayor de 19 años me dijo; "Cada que me cuentas tus historias y como era Venezuela me da como una alegría porque siento que viviste una Venezuela en la cual yo hubiese querido vivir, sin delincuencia, comida, y sobre todo el hecho de poder comprar cosas y aun así te alcance para muchas cosas" Esto me llena de impotencia y nostalgia porque ellos no has visto nada más que lo que está pasando actualmente y ver como su juventud pasa me frustra como madre, porque de una manera u otra yo viví. Un tiempo mejor como madres deseamos lo mejor para ellos.

Pero siempre tengo la fe de que mejores tiempos vendrán y que estaremos unidos nuevamente. Pero como personas debemos aportar un granito de arena y ayudar a quien más lo necesite.