Venezuela a oscuras - por un músico venezolano
()
Venezuela... un país bello que está atravesando momentos difíciles por razones multiples. Son las 10:23pm, hora en la que empecé a escribir este post, y así estamos ahorita, sin energía eléctrica.
Este es el pan nuestro de cada día. Fallas eléctricas, escasez, inseguridad, tantos males que padecen en diferente medida tantos pueblos del mundo, y que ninguno merece, pero aquí parece cuento de terror.
Muchos se preguntaran:
¿ Cómo hacen para soportar y sobrevivir esa situación?
Hay varias respuestas para esa pregunta, y las mías, personales, son: NO LO SE!
2: Supongo que no tenemos otra opción.
Por otraeso parte, el venezolano es muy alegre y optimista, saca fuerzas de flaqueza, y siempre he admirado eso, pero llegamos a un punto en el que ya no causa gracia tal situación.
Quejas, ayes, peleas, alaridos, improperios, es lo que escucho a diario, en el metro, en la calle, en.las esquinas, en los negocios. Y vuelve la pregunta... ¿Como soportan esa situación?
Es difícil, muy difícil, la verdad, y sigo sin saber la respuesta.
En mi caso, tengo algo que es mi bastón, mi soporte, la base de mi existencia... La música.
Particularmente agradezco cada día de mi vida el que la música esté, forme parte y, no, el que la música sea eso, mi vida. A través de ella me libero, me desahogo, me expreso, lloro, quiero, amo, existo, subsisto, yo, mi alma, mi espíritu, mi esencia.
Cuando quedamos a oscuras ( como ahora ), sólo tomo mi guitarra e improviso algo que demuestre lo que siento en estos momentos ( tristeza, ira, impotencia... ), y mi guitarra resuena en las casas de mis vecinos, a veces interrumpida la melodía por las voces de los mismos pidiéndo que toque ciertas canciones. Cuando toco el cello simplemente callan y escuchan, como aprobando y conectandose con el cóctel de sentimientos que brotan de esa música melancólica.
La música me ha salvado la vida en muchas ocasiones,y creo que, con la situación de este país, lo sigue haciendo a diario.
Gracias, Dios, por la música! Con ella hago invisibles los improperios que lanzan los que solo pueden usar su boca para expresar su desacuerdo con esta situación tan deleznable.
Ahora, luego de compartir este post, me despido, debo tocar hasta que llegue la luz.