Perturbadora historia real.

in #venezuela6 years ago (edited)
Como me gustaría decir que el siguiente relato le paso al amigo de un amigo mío, pero la realidad es otra...

Todo ocurrió la madrugada del 14 de diciembre del año 2017, después de varios meses y de por fin superar el pánico que me produjo esa trágica noche, contaré lo que nos ocurrió. Esta no es una historia paranormal -aunque sí puedo contarles una que otra experiencia de ese tipo pero no será en este post- esta historia tiene que ver con personas reales.

Habiendo transcurrido el día como cualquier día "normal", mi hermana, mi padre y yo nos fuimos a dormir cuando eran alrededor de las 11:30pm (23:30h), pero mi madre se quedó despierta porque no tenía sueño y aprovecharia "adelantar lo más que pudiera". Normalmente cuando es diciembre, tenemos por costumbre quedarnos despiertos hasta tarde, haciendole compañia a ella y ayudándola en las cosas que hace -es de ese tipo de personas que le encanta la navidad y desde el inicio del mes se la pasa ocupada- pero ese día ninguno estuvo dispuesto a quedarse con ella, todos a excepción de mi madre preferimos irnos a dormir, cosa que tiempo después pienso pudo salvarnos la vida.

Cuando era aproximadamente la 1:20am (01:20h) al ver la hora y sentirse un tanto cansada, mi madre decide irse a dormir, cayendo rápidamente dormida.

A las 2:04am (02:04h) empezó la pesadilla, fue a esa hora cuando pensé que estaba teniendo un mal sueño...

Pero ¡NO! no era una pesadilla o mal sueño, en mi habitación habían 4 hombres, quienes me despertaron de muy mala gana y colocaron una linterna en la cara -hasta el dia de hoy me cuesta dormir tranquilamente- en ese momento mi mente no procesaba que estaba ocurriendo, qué era lo que pasaba...
Fue entonces cuando creí que nos estaban secuestrando en nuestra propia casa, pero lo peor no fue esa sensación, sino la sensación que sentí por querer saber dónde estaban mis padres, pero sobre todo donde estaba mi hermana (que dormía sola en la primera habitación). Todo paso muy rápido, en fracciones de segundo mis sentidos se agudizaron -en lo que creo fue el efecto del miedo y la adrenalina- pude escuchar a mi madre llorar e implorar que "no hicieran nada a mi hermana", que "no le hicieran daño", que "la llevaran a la habitación donde estaba ella", la forma desgarradora en la que mi madre imploraba a los malhechores forman parte de las peores cosas que he podido escuchar. Mientras escuchaba todo eso los cuatros sujetos que estaban en mi habitación me maniataron y me pusieron una funda en la cabeza que cubría toda mi cara que solo me produjo fuertes ganas de vomitar y de llorar...

Lo que supe después es que no eran solo los cuatro hombres que estaban conmigo, eran cerca de diez sujetos desconocidos que estuvieron en mi casa la madrugada de ese 14 de diciembre. Por suerte nuestra, nos reunieron a todos -a mi hermana también- en la cama de una habitación (creo era la habitación de mis padres), todos llorábamos aterrados ya que no sabíamos que iban hacer con nosotros. Hasta que pudimos escuchar cuáles eran sus intenciones esa noche, al menos dos voces distintas eran los que estaban al mando. Y entre todos los males que hubieran podido hacernos, eligieron el menos grave para nosotros, se metieron a nuestra casa para ROBARNOS, no tenían intenciones de secuestrarnos o el de violar a mi madre, hermana o peor quitarnos las vidas...

Esas personas barrieron y se hicieron con la mayoría de nuestras pertenencias, se llevaron tantas cosas que incluso hoy aún no nos recuperamos y no solo por las cosas materiales robadas, que si quieren tener una idea se llevaron desde ropa y calzados, hasta ambos vehículos de mis padres y muchísimas cosas que fácilmente pueden imaginar. Como si no fuera poco, tuvimos que buscar ayuda psicológica, nuestra experiencia fue terrorífica y es algo que no le desearía a nadie.

Aunque...
A manera de ejercicio, piensa por unos minutos que son horas de la noche y estás en la comodidad de tu casa durmiendo, cuando de manera repentina y abrupta, unos desconocidos interrumpen tu sueño para decirte ¡QUÉDATE QUIETO Y NO GRITES!

Y eso lectores, es mi perturbadora historia real.

P.D: Cuando me referí a que "eso pudo salvarnos la vida" lo dije porque ¿cómo hubieran podido reaccionar los malhechores si en vez de sorprendernos eran ellos los sorprendidos? o ¿cómo hubiéramos reaccionado mi madre y yo al ver como casi una docena de hombres irrumpian en nuestra casa? En lo que parecía la madrugada de un día normal.