¿CRISTIANOS SOCIALISTAS, ESO ES POSIBLE?
“... ¿quién planta una viña y no come sus frutos? ¿Quién cuida de un rebaño y no se alimenta de su leche?...No pondrás bozal al buey que trilla…, el que ara tiene que arar con esperanza y el trillador, debe hacerlo con la esperanza de cosechar.” San Pablo- La Biblia
¿Tengo que ser experto en doctrinas políticas para entender un razonamiento tomado de la más sencilla cotidianidad, como el que expresa San Pablo en el párrafo anterior?
La solución económica-social que proponga cualquier tipo de gobierno, no puede ser contraria a la dignidad de la persona humana, que desde antes de la aparición de Estado político alguno, siempre ha tenido la tendencia a disponer libremente del fruto de su trabajo.
Para nadie es un secreto que cuando se habla de socialismo, se habla de un Estado que tiende a convertirse en único empresario y gestor de la economía, por tanto no me extrañaría que lo que esté ocurriendo con todos los lamentables sucesos en nuestro país Venezuela, sea consecuencia de dirigir y reglamentar erróneamente la escasa producción, el almacenamiento y distribución de las mercancías, justamente por no conocer las verdaderas necesidades de consumo de la población.
Me pregunto ¿por qué si lo más sencillo es entender que en la demanda es donde se manifiestan con más exactitud las necesidades de consumo, el poder público sigue empeñado en una doctrina irrealizable, y aceptable por la población sólo en el caso de que se le imponga un régimen de cuartel, porque no está fundada en la naturaleza de las cosas.
La vida económica del país está muy mal, porque los precios así lo indica, esta es una realidad inocultable e inmune a las justificaciones, y además acompañada de la prueba más palpable y contundente: las colas.
Volviendo a las expresiones de San Pablo, qué estímulo hay para el trabajo, ¿acaso ignoran la sicología humana?; si el beneficio lo repartirá el Estado bajo su criterio, al final lo que se produce en un gran fomento a la desidia y al descuido.
Aunque este ha sido un intento muy breve por tratar de entender el problema, la omisión de estas ideas del discurso oficial, me deja el sabor amargo de que en el fondo simplemente lo que se pretende es que todos dependamos del Estado en algún momento, para cubrir nuestras necesidades y las de nuestras familias, pues esto creen las autoridades que les garantizará su permanencia en el poder.
Hay que seguir “arando con esperanza”, la miseria y la esclavitud cada día avanza más (paradójicamente la condición que Marx observó en su tiempo y motivó sus pensamientos), y comenzará a instaurarse, como ya está sucediendo, sin oportunidad de apelación alguna