ACOSTUMBRANDOME A VIVIR SIN EL...

DEFINITIVAMENTE EN ESTOS ÚLTIMOS 15 DÍAS MI VIDA HA CAMBIADO RADICALMENTE, EL YA NO ESTA CON NOSOTROS, YA NO SE ESCUCHAN SUS GRITOS, SUS CARCAJADAS, SUS REGAÑOS, SUS ARTEFACTOS ARREGLANDO TODO .. NO ESTA , Y SU AUSENCIA DUELE TANTO, NO FUERON DOS DÍAS, DOS MESES, DOS AÑOS LOS QUE COMPARTÍ JUNTO A EL.. FUERON 20 AÑOS, LA MITAD DE MI VIDA..

CUANDO LO CONOCÍ ME IMPACTO POR SU PORTE DE HOMBRE MAYOR, INTERESANTE, ELEGANTE, INTELIGENTE. TODO UN CABALLERO.

LUEGO DESCUBRÍ QUE ERA EL HOMBRE DE MI VIDA, CON SUS DEFECTOS Y VIRTUDES; PERO LO ERA..

JAMAS ME IMPORTO LA DIFERENCIA DE EDADES, (30 AÑOS DE DIFERENCIA PARA SER EXACTOS), YO NO PENSABA EN ARRUGAS, ENFERMEDADES EN NADA, SOLO ESTABA CAUTIVADA POR EL, POR SU FORMA DE TRATARME , POR SU PROTECCIÓN Y MI ESTABILIDAD.

ME REGALO LO MAS HERMOSO QUE LE PUEDE SUCEDER A UNA MUJER. MIS TRES TESOROS, MIS HIJOS QUE LOS AMO CON TODO MI CORAZÓN (SIEMPRE LES DIGO QUE LOS AMO HASTA EL INFINITO Y MAS ALLÁ). SIMÓN AURELIO ES EL MAYOR, EL HOMBRE DE LA CASA, UN JOVEN DE 19 AÑOS CARISMÁTICO, HUMILDE Y DE MUY BUEN CORAZÓN, ESTUDIANTE DE ING EN INFORMÁTICA CON UN GRAN FUTURO POR DELANTE ESTOY SEGURA. MI NIÑA GINETH VIRGINIA, LA DEL MEDIO, ADOLESCENTE CON 13 AÑOS, UN CARÁCTER MUY FUERTE , PERO SOÑADORA , CARIÑOSA E INTELIGENTE, ESTUDIA 2DO AÑO Y TAMBIÉN ESTOY SEGURA SERA UNA MUJER DE BIEN, CON UN FUTURO PROMETEDOR.

MARCO AURELIO, ES EL PEQUEÑO DE LA CASA, REVOLTOSO, INTELIGENTE, CARISMÁTICO, CARIÑOSO, ES UN NIÑO ESPECIAL; Y NO PORQUE TENGA SINDROME DE DOWN SINO PORQUE ES LA ALEGRÍA DE LA FAMILIA. TIENE 4 AÑOS YA ESTA EN EL COLEGIO INICIÁNDOSE EN LA ESCRITURA Y LECTURA.

MIS HIJOS SON MI MAYOR BENDICIÓN, POR ELLOS LUCHARE Y LOS AYUDARE Y GUIARE PARA QUE SEAN PERSONAS DE BIEN, COMO TU LO QUERÍAS MI AMOR.

SIEMPRE SIEMPRE SIEMPRE TE RECORDARE , TE RESPETARE, TE AMARE. Y CUIDARE DE NUESTROS HIJOS, SOLO TE PIDO FORTALEZA Y QUE ME GUIES PARA YO GUIARLOS A ELLOS POR EL CAMINO DEL BIEN. CUÍDANOS DESDE DONDE ESTÉS.

TE AMAMOS CON TODO NUESTRO SER SIMÓN AURELIO BOLÍVAR LISCANO.

POR SIEMPRE, TU FAMILIA...