Este es un tema que siempre me ha causado tristeza. No entiendo cómo puede la ambición de algunos seres humanos dañar su propio hogar y peor aún el único lugar en el que se puede vivir. No sólo no le importa donde vivirán sus descendientes sino que también acaban con los pobres animales.
Un día le expliqué a mi hija de 5 años que gracias a las plantas podemos respirar porque de ellas y solamente de ellas obtenemos oxígeno. Ella me escuchó atenta y luego me preguntó "¿Entonces porqué matan a los árboles? ¿Nos vamos a quedar sin oxígeno?"
Me sorprendió que una pequeña tuviera esa forma de pensar y que a millones de adultos les cueste tanto comprender algo tan simple.
Te saludo y te abrazo querida Raquel
Totalmente de acuerdo contigo amiga, hasta los pequeños lo entienden, pero los adultos no. La codicia es el verdadero verdugo de la naturaleza. Felicitaciones por tener una hija que cuestiona, son pocos lo que lo hacen, sigue educándola así, necesitamos una generación que despierta que no se dejen aborregar en el sistema. Un abrazo y gracias por visitarme.