DEPRESION:
Hace aproximadamente dos semanas la actitud de mi mejor amiga había cambiado radicalmente, estaba muy distante, creí que tenía algún problema, mas mi insistencia no servía de nada. Sin embargo siempre fui terca y más cuando suponía que algo andaba mal; con el paso de los días pude notar muchas cosas. Como cuando le escribía y su forma tan cortante de responderme, su ausencia constante a clases, la pereza al realizar las actividades cotidianas; sus constantes ganas de dormir, estaba muy segura que algo andaba muy mal, el pasado viernes por la noche recibí una llamada de su padre angustiado diciéndome que no había llegado a casa. Intente llamarla sin ningún éxito, tipo 2am recibí la llamada de su hermana asegurando que había vuelto en un muy mal estado.

Ya conforme, pude conciliar el sueño lo cual lamente al día siguiente al ver varios mensajes de ella, mensajes que me quebraron el corazón, mensajes en el que se despedía de mí, agradeciendo todo; diciéndome que ya no podía seguir más… había decidido acabar con su vida.

Afortunadamente no llego a mayores consecuencias, si se hizo daño pero no el suficiente como para terminar con su vida
¿Pero qué pasa para que tengas que llegar hasta ese punto?

Al principio tienes problemas con las cosas pequeñas, pero luego eliges ignorarlas es como una jaqueca, te dices que es temporal, que pasará que solo es un mal día. Pero no lo es, estas atascado en ese estado mental, te acostumbras a usar una máscara social y vivir entre los demás por qué es lo que tienes que hacer, es lo que hacen los demás.

Pero el problema no desaparece, te esfuerzas por actuar los días y empieza a costarte más y más, allí es cuando comienzas a caer más profundo y es entonces cuando empiezas a alejarte de amigos y familia, a veces ignorándolos por completo.

Todas las satisfacciones desaparecen, las pequeñas cosas que solían hacerte feliz ahora son insignificantes, incluso las cosas simples se vuelven dolorosas; no tienes motivación. ¿Por qué continuar haciendo cosas si nada te hace feliz? Todo esto te hace sentir incluso peor y te ves atrapado en un círculo vicioso.

De pronto te das cuenta que estás viviendo en cámara lenta, los días son indistinguibles, una pesadez que llena tu mente y se reparte por todo tu cuerpo, sientes que nunca volverás a ser feliz; continuas alejándote y destruyendo relaciones, quizá estés avergonzada por todo lo que has hecho y lo que no has hecho. Claro, hay una parte de ti que quiere arreglar las cosas, un impulso repentino que te hace querer salir y conocer personas; lamentablemente no dura mucho porque te sugestionas que de todas formas no funcionara.

Las cosas que emocionan a tus amigos te dejan indiferente, dejándote en claro la gran brecha que hay entre tú y ellos. Otro fracaso no es una opción ¿Qué pasara si asi sucede?; para evitarlo elijes estar sola, donde te sientes segura, donde nadie te hace preguntas.

La baja autoestima y la falta de propósitos se vuelven insoportables, finalmente te das cuenta que no puedes continuar o sencillamente ya no quieres continuar así. En efecto sucede una de dos cosas, decides buscar ayuda o puede que intentes suicidarte…

La depresión es un enfermedad silenciosa, aunque queramos minimizarlo, debemos empezar por aceptar que es una enfermedad, así como muchas enfermedades tiene cura.

Después de su recuperación, estuve constantemente con ella tratando de contagiarle mis ganas de vivir y querer explorar el mundo, hoy gracias a Dios ella está aquí, conmigo más alegre y con mucho por delante.