Concurso Cervantes: 2ª Entrega
Guernica: un horror de hoy
No puedes pasar por el Guernica e irte como viniste. Te paras frente a él y tal vez haya personas alrededor, pero tú no las ves, hablan, pero no las escuchas. Tú mismo intentas decir algo con la confianza que tenías antes de llegar y solo te sale un susurro respetuoso, como si estuvieras en un funeral. Es que eso es el Guernica, una obra que, como un funeral, nos pone cara a cara con la muerte. Todo bien, sabemos qué es la muerte, pero aquí hay algo más. Aquí el artista, usando un blanco y negro aterrador, en trazos simples que solo reflejan lo importante, nos da un soplamocos y nos dice que, si somos seres humanos, somos partícipes de esto. Porque como seres humanos hemos llegado a lo que muestra la pintura, y de eso hace solo unos cuantos años, de modo que aún no hemos tenido tiempo de evolucionar lo suficiente como para decir en nuestra defensa que fueron otros los que mataron al niño, al soldado, al hombre quemado en su casa y desmembraron a la mujer e hirieron al caballo y a la paloma. No. Fuimos nosotros. Pero también somos nosotros los que nos quemamos, los que sostenemos una espada rota o una flor, los que atisbamos, estrujándonos el corazón, por las ventanas que a veces podemos, o nos dejan, abrir. También, finalmente, somos nosotros los que clamamos a gritos mirando al cielo, hacia ese ojo que todo lo ve, hacia esa luz que nos daría la salvación, pero que, si miramos bien, no es más que una bombilla eléctrica. Por sobre todo el Guernica nos sobrecoge porque es intemporal, entonces reconocemos en su imagen lo que vemos a diario en las noticias y nos invade la tristeza de pensar que nada ha cambiado, que al Guernica en realidad se le podría poner el nombre de otras ciudades donde hoy matan niños y sin modificar ni una pincelada, los visitantes se pondrían delante y asentirían reconociendo un arte tan “actual”. Por último, pensando en todo esto, se me ocurre que he descubierto porqué susurramos frente al Guernica, es porque nadie habla con el mismo tono después de recibir el soplamocos.
Concurso patrocinado por el witness @cervantes. No te olvides de votarlo en la siguiente página: http://www.steemit.com/~witnesses