Para entender este tema a profundidad y conseguir la clave del inicio del ascenso requerimos refrescar un par de conceptos los cuales nos serán de utilidad en la conformación de las estrategias para lograrlo.

Inteligencia emocional.

Esta reside en la capacidad de comprender e identificar correctamente las emociones y poder controlarlas de forma correcta, con el fin de estar en armonía con nuestro entorno social. Sirviendo para lograr metas trazadas manejar el stress y la superación de cualquier inconveniente que se nos presente en nuestro día a día.

Programación Neurolingüística.

Esta programación que es a su vez un modelo de comunicación, con técnicas enmarcadas a hacer más fácil la obtención de nuestras metas planteadas mediante la enseñanza de estrategias para gestionar entre otras cosas nuestros estados emocionales.

Programación: Refiere a las experiencias que recopilamos y que nos hacen ver la vida a nuestra particular forma.

Neuro: Referido a nuestro sistema neurológico, nuestras experiencias y percepciones personales.

Lingüística: Lenguaje verbal y no verbal con los cuales comunicamos nuestras experiencias.

Muchos autores coinciden en llamarla La Ciencia del Éxito, por su capacidad de otorgar herramientas que facilitan o aceleran los procesos de cambio.

Por medio de esta podemos desde cambiar creencias limitantes hasta dejar hábitos nocivos para nosotros como individuos.

También nos puede ayudar a canalizar experiencias traumaticas y convertirlas en aprendizaje, por esto se reitera que mediante el PLN podemos controlar el funcionamiento de nuestra propia mente.

Desarrollo Personal.

Cuando buscamos incansablemente el mejoramiento continuo, conseguimos desarrollar nuestro máximo potencial en cualquier área, a eso se le considera la base de todo éxito alcanzado.

Incalculables estudios desde principios de nuestra historia escrita se han realizado entorno a los seres que consiguen el éxito en sus vidas dando indicios de los que es común en la mayoría de los casos.

• Lo que se proponen lleva la concordancia de sus deseos, pensamientos e ideas.
• Tienen un sistema de creencias que les permite desarrollarse.
• Cuentan con conocimiento específico del área que quieren desarrollar.
• Cuentan con la capacidad de plantearse objetivos realistas y cuantificables.
• Por último y como bastión de todo esto, el optimismo es tomado como la clave de todos los procesos que llevan al éxito.
  

Teniendo estos datos en cuenta, es muy fácil ver el camino al éxito, como quien ve desde la selva africana la punta del Kilimanyaro, sin embargo es la constancia y las ganas de concretar una meta lo que te hará seguir cada paso una vez aprendidos para la consagración de lo planteado.

Hace un tiempo leí en un libro cuyo nombre me evade algo que viene muy bien a este tema, parafraseando su contenido recuerdo que una persona quería tener dinero (lo que él consideraba su éxito personal), y su mentor lo llevo al mar, lo hundió en él y lo sostuvo abajo mientras aquel personaje luchaba por su vida al querer salir a flote, cuando lo dejo emerger a la superficie y luego de calmarlo le dice algo como: Avísame cuando tus ganas de tener dinero sean tan grandes como las ganas que tenías de respirar

Las ideas, los deseos, las creencias y el optimismo deben estar enfocadas en conseguir la meta que nos hemos planteado, teniendo metas claras y cuantificables para cada una de las etapas de nuestro crecimiento y usando la inteligencia emocional para que ninguna de las emociones precargadas en nuestro sistema nos desvié de nuestro objetivo o nos saque del sendero que nos lleve a él.

La diferencia entre un sueño y una meta es que por la meta trabajamos mientras que el sueño es algo por lo cual solo suspiramos, el vicio más grande es el auto saboteo, y una de los virus más letales es la ausencia del optimismo y la no preparación para alcanzar las cumbres deseadas.

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