Teen Titans | La familia es lo primero | Cap 2
Regreso a Gótica
Hola a todos. Les habla @Mr Rern
Bueno, les recuerdo, que por más que quisiera los titanes, batman y batichica no me pertenecen, este fic es una muestra de una amiga, pueden visitar su historia, yo estoy dando algo de contexto para seguir con el siguiente arco argumental de la historia que estoy preparando. Pasen por las historias de mi amiga @Coralina
En la habitación de Nightwing, StarFire lo miraba fijamente, en silencio, con paciencia , esperando un aliento de humanidad del hombre que estaba parado junto a ella. Casi prefería que le gritara, casi. Se sentía culpable porque en todo el tiempo que llevaban juntos le había ocultado gran parte de su pasado, a pesar de su relación. Cualquier otra chica, cualquier otra persona, le estuviera reclamando y exigiendo respuestas pero era Star con quien estaba tratando.
− Esa chica de la que hablaban ¿es tu hermana? – preguntó con cautela, no era un secreto que el líder de los titanes era bastante volátil cuando hablaban de sentimientos, ella lo sabía bien, le había costado bastante acostumbrarse y lograr que se abriera un poco más con ella.
Su pregunta lo desconcertó y a la vez lo alivio, estaba tan metido en sus pensamientos que no sabía cuánto tiempo llevaban así, pero es que no sabía cómo empezar "Hey amor, en 4 años de noviazgo nunca pude decirte que tengo una hermana menor, ¡Sorpresa! –sonaba bastante mal
− Media hermana en realidad, somos hijos del mismo padre – suspiró y fue al armario, justo en el rincón, tras un pedazo de pared falso, estaba una caja de madera de tamaño mediano, la tomo y se dirigió donde la pelirroja.
En la cara de Star se veía la mirada acerca de lo que estaa pensando a pesar de no decirle nada a Dick, Elizabeth no podía ser mayor que él y eso, sólo dejaba una explicación.
− Es una larga historia –suspiró– mis padres estaban casados, yo era hijo único, ellos eran artistas de circo, trapecistas –hablar de su pasado siempre había sido difícil, esa era una razón por la que no le había contado mucho –se hacían llamar "Los Grayson Voladores"- lo decía con asombro y un brillo en sus ojos que le agradaba a Star- es complicado Star, ellos se amaban, pero cuando yo tenía dos años, tuvieron una mala racha al parecer, una crisis, en realidad no lo sé, sólo sé que mi padre tuvo una aventura de una sola noche con una mujer que por entonces tenía poco de trabajar en el circo, una adivina creo, ni siquiera yo lo sé muy bien, mi padre nunca supo de la existencia de Elizabeth, después de lo ocurrido ella dejo la compañía y se unió a otra, por lo que sé, jamás volvieron a verse, ignoro totalmente si mi madre supo alguna vez eso.
− Dick – Star sólo lo llamaba así cuando estaban solos, era una sensación extraña la que se sentía en la habitación, ella no sabía básicamente nada de "Richard Grayson", el pelinegro se sintió peor, ella se veía indecisa sobre lo que iba a decir –no tienes que hacer esto.
− No, sé que debería habértelo dicho antes, pero no es fácil, sin embargo ya es tiempo de que sepas la historia completa –Nightwing suspiró, realmente no era nada fácil, tenía meses repitiéndose que tenía que hacerlo y siempre se detenía, ahora ya no podía retroceder, era inevitable.
Abrió la caja y saco un par de fotografías, le mostro una, era una familia, una pareja joven con un pequeño Dick de un año. Ella la tomo y la miro con cautela. Ambos eran pelinegros, él era muy parecido al hombre que tenía frente a ella, con sus bellos ojos azules, como la marea fría del mar en un día de verano mientras, que la mujer los tenía castaños, pero llenos de calidez y felicidad, sonrío al darse cuenta de ello. Lo que más le llamo la atención fue el amor que profesaban al bebé, aunque sólo fuera una fotografía, ella podía sentirlo.
− Mis padres, Richard y Mary Grayson, como ya dije eran artistas de circo, yo crecí con ellos e incluso actúe algunas veces a su lado –sonrió con nostalgia –cuando tenía 10 años un hombre los asesinó en medio de un show en ciudad Gótica y lo hizo parecer un accidente, creían que era un reto no usar la malla protectora, aquella noche las cuerdas de los trapecios se soltaron y… –soltó un suspiro impotente, tratando de sacar las palabras de sus entrañas, hacía años que no hablaba de sus padres, Raven lo había visto en su mente, no había tenido que explicarle nada, pero esto era diferente, tener que expresarlo de su propia boca era muy dificil hacerlo.
− Al quedar huérfano, iría a dar a un orfanato, un hogar para niños sin familia, dado que mis padres eran lo único que tenía. Aunque hubiera querido no podía quedarme con los del circo por ser menor de edad –le mostró los periódicos viejos que aún tenía y hablaban de sus padres y su muerte –sin embargo, Bruce Wayne, el multimillonario empresario de la ciudad decidió ser mi tutor, obteniendo mi custodia y haciéndose cargo de mí. –Ahora le mostró una fotografía de Bruce, Alfred y el mismo Dick de unos 11 años, ella le tomo la mano y le sonrío con ternura como diciendo "ya paso, estoy aquí".
− Lo lamento mucho – la voz de Starifre era casi un susurro pero en aquella habitación no era necesario más para que él la entendiera.
− Gracias – continúo, ya un poco más tranquilo –Me tomo un año averiguar que mi tutor no era sino el famoso héroe de la ciudad, Batman –dejó que lo procesara y guardó silencio, sabía lo que estaba haciendo,estaba revelando un secreto que no era de él, pero que a la vez sí lo era, tenía que contarle la historia completa y confiaba plenamente en ella, pondría sus manos al fuego por ella –cuando me enteré hice que me entrenara, en algún momento, me convertí en Robin, su compañero, al principio era por venganza, quería encontrar al asesino de mis padres –silencio de nuevo, no tenía que explicarle lo difícil que había sido no matarlo, quizá en otra ocasión o quizá ella ya lo supiera.
− Elizabeth – por supuesto, ella lo sabía, lo conocía más que nadie y ahora intentaba desviar el tema.
–Cuando tenía 12 años llego una mujer a la mansión, era una trabajadora social, traía con ella a una pequeña de 9 años, pelinegra, de ojos azules como los míos, temerosa a todo –sonrió al recordar la primera vez que la había visto –con una carta para Bruce, al parecer su madre había muerto y no tenía a nadie más, así que escribió una carta donde le explicaba a Bruce que la niña era mi media hermana, que mi padre era el suyo y que nunca supo de su existencia, al principio le costó aceptarlo, de hecho mando hacerle estudios de ADN pero todos arrojaron la verdad, esa niña era mi hermana.
−Debió ser difícil –comento la titán, mientras veía una nueva fotografía, dos niños, sumamente parecidos, sólo que él parecía enérgico y ella tímida y asustada, el niño la abrazaba de forma protectora.
−En un principio sí, pero, aunque me dolió que mi padre hubiera engañado a mi madre, no tenía caso enojarme con él, él estaba muerto y ahora yo tenía una hermana, en realidad, me alegro mucho que así fuera, sentía que no estaba completamente solo en este mundo, además de tener a Bruce y Alfred –aunque Bruce y Alfred lo habían tratado como si fuera de la familia, tenía un enorme vacío, el cual fue llenado con la sonrisa y los abrazos de Eli.
−Sé que tienes derecho a estar molesta por no habértelo contado, cuando me fui de ciudad Gótica una parte de mi desapareció, a Batman le tomo tiempo perdonarme, a mí me tomo tiempo perdonarme, dejé a Elizabeth con Bruce, quien era su tutor legal también, casi de inmediato los conocí a ustedes y aquí no había "Dick" o "Richard" era sólo Robin, si alguien se enteraba quien era yo, podían hacerle daño a Eli, aún pueden hacerlo, sólo sería cuestión de atar unos cuantos cabos sueltos y no sólo lo intentarían para hacerme daño a mí, sino a Bruce y Batman tiene muchos enemigos, no podía arriesgarla, ella no es héroe, es una persona normal –suspiró, había desesperación en su voz, porque le creyera y porque estaba preocupado por su hermana.
− No me molesta porque por eso te conocí pero, ¿por qué dejaste ciudad Gótica? – ella se arriesgó, Garfield le había hecho esa pregunta mil veces pero nunca la había contestado.
− Porque quería encontrar mi propio camino, no el de Batman, el mío –ahora lo tenía, sabía bien quien era, aunque le había tomado años y mucha ayuda de sus amigos.
− Ese chico, Jason ¿quién era? –Star seguía viendo las fotos de unos Dick y Elizabeth más pequeños, tratando de no presionarlo, cuando se trataba de cosas personales y sentimientos, si lo presionabas Nightwing normalmente tendía a retroceder, eso ella lo sabía muy bien.
− Hace unos años, tres creo, Bruce adoptó un chico de la calle, un huérfano, como Elizabeth y como yo, lo entrenó y lo convirtió en el nuevo Robin, yo, no me llevaba muy bien con él desde nuestra separación y sólo supe de él por los periódicos y las noticias, tuvimos una serie de problemas y discusiones pero al final lo acepte, de hecho fue la manera que me vi forzado a hablar con él y lo arreglamos, aunque no estaba del todo feliz, me sentía reemplazado… esa fue una de las principales razones por las que deje de ser Robin, Robin era el asistente de Batman y había uno nuevo - se observaba la impotencia nostálgica que tenía, por ese amargo recuerdo.
− Y te convertiste en Nightwing, lo recuerdo –también recordaba lo difícil que fue dejar de sonrojarse cada vez que lo veía con ese traje tan… ajustado, pero eso no era necesario mencionarlo.
− Poco tiempo después, él y Elizabeth empezaron a salir, sabes en carne propia lo – dudó un poco y frunció el ceño –lo protector que puedo ser? al principio me molesté pero ¿qué más podía hacer? Ella lo quería y no podía oponerme, yo sabía bien lo que era querer – acarició su mejilla y sonrió, esa sonrisa que sólo era para ella y que como ahora, solía hacerla ruborizar.
− Ahora Jason está muerto, como ya oíste no fue un accidente, yo mismo reforcé sus lecciones en motocicleta, lo hicieron parecer así para dar un porque. El Guasón es el enemigo más peligroso de Batman, es por eso que tengo que ir, es mi familia Star –mirandola con ojos decisivos aunque no era lo que había planeado para nada.
− ¿Seguro que quieres que te acompañe? Puedo entender que es algo familiar y... - no quería incomodar, aunque claro, sólo de pensar que estaría cerca de esa engreída rubia de hace un rato, le aterraba aún más y de pronto dijo– Dick ¿quién es esa chica que llamo? – su tono celoso lo tomó por sorpresa, ese iba a ser otro tema que hablar.
− Batichica, su verdadero nombre es Bárbara Gordon, ella es la otra asistente de Batman, ella siempre ha considerado a Elizabeth su hermana menor, está muy presente en su vida y ella, y yo, jum, ella y yo... –mal momento para tartamudear, ella frunció el ceño y su mirada comenzó a ser algo penetrante, su novia celosa era algo digno de ver. −escucha, ella y yo fuimos novios un año y medio, antes de que me fuera de Gótica, terminamos la relación por un montón de cosas, es pasado Star –su rostro se suavizo pero aún no era la dulzura personificada que solía ser.
− ¿Ya no hay nada? –por supuesto, eso quería decir,* dímelo todo de una maldita vez* se le notaba en la cara, era tan transparente que casi sentía miedo.
− Nada, ella sigue presente en la vida de mi hermana, sigue siendo la asistente de mi antiguo mentor pero ya no hay nada entre nosotros, ella no, no se tomó bien que yo abandonara la ciudad, cuando voy a Gótica por lo general ella está de viaje o simplemente me ignora a placer, lo cual es, tranquilizante, cuando nos vemos, bueno, yo no le caigo muy bien –le mostro otra fotografía donde salían las dos chicas del noticiero pero ahora, sumamente felices, la pelinegra aún mantenía ese aire tímido pero se veía alegre.
− ¿Sabes? Hace unos meses hable con Eli, ella quiere conocerte y yo quería que la conocieras, pero debes entender que debo protegerla, y en parte a ti también, aquí somos héroes de tiempo completo, allá existen dobles identidades, no pueden saber quiénes somos, no podemos salir así nada más. No me gusta pedírtelo, pero no me perdonaría si algo te pasara y sería muy problemático si alguien se da cuenta de todo –tomó una bolsa negra dentro de la caja y la abrió.
La bolsa contenía una identificación entre otros documentos a nombre de Kory Anders, además de una peluca de un pelirrojo más leve, más normal y unos lentes de contacto marrones. Hacia unos meses Eli le había ayudado a conseguir todo aquello para que pudieran ir ambos a la mansión, quería que se conocieran antes de… lamentablemente ahora era necesario, lo demás podía esperar.
− Odio pedirte esto, pero he arreglado todo esto para que podamos ir como civiles, será mejor que nadie te reconozca, quiero que vengas conmigo, pero hay varias cosas de las que debo hablarte. Cuando estemos solos en la mansión o con sus habitantes no hay problema, pero si hay alguien más tendrá que creer que eres terrícola, nadie debe saber quién eres y por ahora, nuestros amigos tampoco – si algún titán, viviera o no en la torre, entendía algo, también podía ser un problema, en parte era por eso que había llamado a Wally y no a alguien más.
− Lo entiendo bien Dick, tratare de ser lo más terrícola posible – sólo ella podía sonar tan alegre cuando se le estaba pidiendo que cambiará de personalidad, aunque fuera temporalmente.
− Star, sobre Batichica –claro, también podía cambiar rápido de humor y que las miradas mataran, ahora que lo recordaba, las miradas de su novia sí mataban, así que mejor mencionarlo ahora –mira ella es, ella tiene un carácter muy –no sabía bien como expresarlo y la estaba desesperandose tratando de explicarle a Star –ella es odiosa cuando quiere, aún está molesta porque dejé el equipo, en realidad ella y yo no nos llevamos muy bien y tratará de molestarte, no es mala persona, ha cuidado mucho de Eli, pero, sólo no le sigas el juego ¿sí? Es difícil explicarlo, no te pido que te dejes pisotear tampoco pero –ya no sabía que decir, pero es que ¿qué iba a decir? Que Batichica estaba molesta porque simplemente él seguía respirando y combatía, según ella, intentos de villanos, porque sólo jugaba al héroe, porque había abandonado a su familia… la lista era larga.
− Entiendo, tranquilo, en realidad, me agrada saber que conoceré a tu hermana, aunque sea por motivos tan tristes, novio Dick ¿crees que debo llevarle algo? Quizá mostaza –la imagen del rostro de Eli bebiendo mostaza con una pajilla lo hizo sonreír, sobre todo porque ella la odiaba.
− No, no es necesario, le alegrará conocerte, a todo mundo le alegra conocerte –al menos su pequeña podrá tener una alegría en estos momentos.
Su novia se sonrojo, aún solía hacerlo cada vez que le hacía un cumplido.
− Hay algo más –su rostro se ensombreció, al recordar otra de las razones por las que no se había decidido antes a contarle la verdad – hay algo en lo que Batichica tiene razón, los villanos de la ciudad no se comparan con los de Gótica, ellos son crueles, ellos están locos Star,tienen la completa intención de matarte, por favor, prométeme que te cuidarás y me dejarás cuidarte, ellos son peligrosos y yo no me perdonaría si algo te pasará –la prueba más reciente era la razón por la que se iban y sólo de imaginar a Star frente al Guasón, a Frío, a Dos caras, se le revolvía el estómago.
− Lo prometo, tranquilo, estaremos bien –ella sonrió para tranquilizarlo, pero en el fondo, pensaba que no podía ser tan malo.
− ¿Sabes que te amo? –cuestionó él con una sonrisa de lado.
− Podrías recordármelo –le siguió ella.
− Pues te amo –besó su frente y la abrazo, no podía imaginar una vida sin ella, no después de todo lo que habían vivido.
− También te amo –respondió ella, sólo amándolo podría entenderlo, en eso ella se llevaba el premio nobel de la paz.
Esa misma noche, había varias cosas que le preocupaban pero ya la mayoría estaba arreglada, sólo había un pequeño detalle… ropa.
Todos los civiles tenían ropa, pero ellos no eran civiles y llevar a comprar ropa a Starfire no era su idea de pasar desapercibido.
Aprovecho que Star estaba conversando con Raven en su habitación y busco en su escritorio un celular que tenía para emergencias.
− ¿Alfred? Soy Dick, necesito un favor….
A la mañana siguiente la pareja se despertó temprano, les esperaba un viaje en motocicleta algo largo y Nightwing quería partir lo más pronto posible.
Mientras el equipo empezaba a desayunar y Bestia terminaba de despertar, para tranquilidad de su novia, ya que normalmente así soltaba menos chistes, una nube de polvo apareció en la estancia de la torre, causada naturalmente por Flash (antes Kid-Flash) y su pequeña familia.
Desde luego, nadie entendía porque el líder había pedido la ayuda de los únicos titanes que ahora eran padres, desde hace un año para ser precisos, por supuesto, el chico más rápido no había perdido tiempo a la hora de casarse con Jinx, la bruja pelirrosa tan pronto habían cumplido los 19 ambos y al poco tiempo habían anunciado que serían padres, nadie sabía que había sido primero, si el matrimonio o los hijos, a nadie le importaba, en realidad.
Jinx tenía en brazos al pequeño Joy, mientras su atolondrado padre intentaba difuminar el polvo que había levantado. Star se apresuró a cargar al pequeño, con permiso de su madre, quien por cierto, era su ahijado, Wally no podía pensar en otro que su amigo de años para padrino de su primer hijo y dado que la siempre positiva Star había sido la única que había tratado con amabilidad a Jinx al principio sin que esta hablara siquiera, ella no pudo pensar en alguien más para madrina, resultaba bastante lógico.
Y precisamente era esa amistad de años entre ambos héroes lo que había hecho que los eligiera a ellos, aunque Jinx temporalmente estaba fuera de las misiones dado que el pequeño no podía quedarse con una niñera normal, nadie sabía si heredaría los poderes de alguno de los dos y en cualquier momento los mostraría y eso daría bastante de que hablar, pero bueno, Wally no podía estar lejos de su esposa. Pero él sabía todo de su pasado, sabía porque debía ir a ciudad Gótica y le informaría si los titanes sospechaban algo.
Mientras todos se entretuvieron con el pequeño, Flash aprovecho para charlar un rato con el enmascarado, sin que nadie les prestara precisamente mucha atención.
−Lamento lo de Jason ¿estás bien? – cuestionó, al ser ambos pupilos de miembros de la liga de la justicia sabían todo sobre las identidades secretas de sus mentores y sus compañeros.
− Yo sí, dentro de lo que cabe, pero me preocupa Elizabeth, además no fue un accidente y lo sabes –la conversación con Batichica apareció en su mente para su gran molestia.
− Me lo imaginaba ¿quién? –no era necesario preguntar más, bastaban pocas palabras entre ellos para entenderse.
− Guasón, Batichica llamó, dijo que fuera, principalmente por Eli, Star irá conmigo –su amigo fingió concentrarse en la sonrisa de su hijo y trato de no soltar algo inapropiado.
− ¿Bárbara llamo? ¿Star irá contigo? ¿Le contaste la verdad? –Sin embargo, no podía evitarlo -¿le tomarías una foto a Bárbara cuando llegues con Stafire? es para mi colección- dijo sarcasticamente.
Nightwing casi río, en otras circunstancias, sería bastante gracioso en realidad.
− Es una lástima que vaya a conocer a Eli por esto, no era lo que planeaba –su hermana y su veloz amigo eran los únicos que sabían sobre su idea de ir a Gótica a que se conocieran y todo lo demás, Bestia era un poco imprudente y Cyborg, aunque también era un gran amigo, no había podido decírselo tampoco, más por pena que por falta de confianza.
− Bueno, podrás hacerlo en un par de meses, y estoy seguro que se llevarán muy bien, a Eli le hará bien conocerla, la animará un poco, salúdala de mi parte –por supuesto, todo aquel que la conocía, sentía una innegable fraternidad para con su pequeña hermana y si alguien podría ser otro hermano de la pelinegra era Wally West – dale esto de mi parte –era una pequeña pulsera con mariposas, ella las amaba.
− Gracias, lo haré –era hora de partir y confrontar su pasado y su presente –Star, nos vamos.