Polvo de estrellas: complejidades del ser.
Si nos ponemos a pensar en la composición de nuestro ser a grandes rasgos y a nivel de ciencia podríamos comenzar por decir que estamos formados por 206 huesos y 230 articulaciones, más de 50 billones de células agrupadas en tejidos y 9 sistemas; que además estamos divididos en cabeza, tronco, 2 extremidades superiores y 2 inferiores, 5 sentidos, y un corazón que late alrededor de 50 y 100 latidos por minuto, a nivel social somos individuos con diferentes estratos, costumbres, acentos, idiomas, lenguajes, creencias, colores, y condiciones físicas, que estamos regidos por una sociedad que ha creado sus propias reglas a lo largo de los años que solo mantienen sus cimientos en la consciencia colectiva, somos seres con propósitos, con metas, con un orden de pasos a seguir para alcanzar un fin, ya sea una familia, un título universitario, un buen empleo, desarrollar un emprendimiento, o todas las anteriores. a nivel espiritual somos seres de luz, individualmente conectados a nuestro YO, o al dios en el que cada uno tiene su fe, somos seres de energía regidos por el universo, con una capacidad inmensa de crear y de transformar, las oraciones hacia nuestro ser supremo nos abren un canal directo de comunicación a nuestros deseos más profundos. La mente y el espíritu son el núcleo de nuestro motor. Los seres humanos somos un cumulo de complejidades, que a pesar de poseer patrones similares, cada persona está regida por un pensamiento diferente, me gusta pensar que la expresión de "cada cabeza es un mundo" es real, existen tantos planetas descubiertos y sin descubrir, que probablemente cada persona representa uno de esos increíbles mundos inciertos. A diferencia de todos los seres creados en la tierra donde somos dentro de lo que conocemos el único planeta con seres vivientes, somos los únicos capaces de pensar, de hablar, de comunicar nuestros sentimientos, de imaginar, de soñar, de vivir en dos mundos paralelos (sueños y realidad), que quien sabe cuál de los dos es real, quizá y lo creemos como vida, es un sueño constante, la vida es incertidumbre, quien tiene la certeza de que las cosas son como nos hemos acostumbrados a que sean, tenemos una mente poderosa, mucho más poderosa de lo que nosotros creemos, es capaz de producir cosas increíbles, cada mente está llena de herramientas con una utilidad para construir cosas diferentes, la mente aun "dormida" es capaz de seguir construyendo, cosas posibles e imposibles en tiempo real, somos una maquina potente, mágica, poderosa, pero conscientemente no somos capaces de saber cuánta capacidad posee y simplemente existimos instintivamente, llevados por nuestras necesidades humanas y naturales, si nos detuviéramos un momento a pensar, ¿que hacemos aquí,?¿quienes somos? ¿por qué estamos aquí?, y ¿cuál es nuestro propósito como individuos? más allá de las cosas materiales, quizá supiéramos entendernos más a nosotros mismos. Quizá no existiera tanta depresión, y tantos suicidios, quizá cada quien supiera su valor en el mundo y consiguiera su propia paz. Todo está lleno de “quizás”, todo es muy ambiguo y la vida está llena de diferentes tonalidades, que no se pueden resumir en un solo color, nos toca aceptar y aceptarnos como seres humanos complejos, diferentes, a veces más seres que humanos, y con una inmensa variedad de caracteres. al final no podemos saber en ciencia cierta que somos en realidad, ni siquiera de dónde venimos, ¿somos la evolución de un mono?, o ¿el resultado de Adán y Eva?, ¿vinimos del polvo y en polvo nos convertiremos? o ¿somos simplemente un polvo de estrellas? existen muchas teorías de diversas ramas, y al fin de cuentas cada uno se aferra a la que mas se mejor compagine con su personalidad, particularmente quiero aferrarme a la idea de que si estamos en algún punto íntimamente ligados con el universo.