Recordando quienes somos #1 "Un viaje a través del tiempo"

Recordando quienes somos es un proyecto que tengo desde hace casi 2 meses o incluso menos donde he tenido como este estallido de ideas que no he sabido como plasmarlas, de qué manera en sí… no sabía si quizás organizar conferencias respecto a ello (de lo cual soy totalmente inexperta, pero por algo se empieza).
Si quizás organizar algún tipo de taller, algo online no lo sé. Pero desde hace un mes estoy entregada a steemit, siendo a parte de mi mayor fuente de ingresos el lugar donde a través de palabras logro desenvolverme para ser yo misma, y que mejor lugar para poner mis palabras de lo que deseo hacer más que este.

¿Porqué recordando quienes somos? ¿Qué significa?

Desde hace algunos años me he interesado por el crecimiento personal, auto-ayuda, espiritualidad, todo lo que me pudiese hace entender, el para qué de algunas situaciones, si realmente somos lo que pensamos, si alguna vez dejaremos de sufrir, de preocuparnos, y de sacrificarnos. Existieron momentos en los que me decía si la vida es una constante lucha ¿Para qué vivir?.

En la búsqueda de este algo, me aferré a personas de las que creí que tenían la solución a mis problemas, a través de los cuales sentí decepción, rechazo, culpa, miedo… me aferré a cosas que luego perdí o se salieron de mis manos, me aferré a mi percepción de la vida, que era más que una percepción aprendida porque no era mía.

Hasta que en medio de todo eso, mientras excavaba un hoyo en la tierra y apartaba con mis manos todo lo que creía que me iba a ser feliz, me encontré a mí.

Y me di cuenta que realmente jamás me había visto, jamás me había parado a preguntarme si lo que creía ver en el mundo era totalmente real, si lo que creía, y me dijeron de mí era realmente cierto… ¿era lo que dicen de mí?, ¿soy lo que yo pienso de mí?

Me vi y me dije ¿realmente estás haciendo todo lo que deseas hacer? ¿Ó lo que haces es con el propósito de que alguien más te vea?, una palmada en el hombro, o la ”satisfacción” de que otros vean que lo “estás haciendo bien” no se compara con el hecho de no depender de que alguien más se enorgullezca o se sientan bien por nosotros, que cuando ocurre está bien! Es genial, pero cuando no ocurre debemos saber que somos poderosos y geniales tanto como si los demás lo piensan como si no…

Claro todo esto también tiene una explicación, de niños nos enseñaron siempre a gustar, a depender de la aprobación de nuestros padres, que en parte fuésemos esclavos de los que ellos creían que era correcto. Pero a ellos también les enseñaron lo mismo así que no podían enseñarnos nada más que eso.

Somos seres increíbles, poderosos, con la habilidad de pisotear la palabra imposible y todo lo que se asemeje a ella. Pero son muchas las ocasiones que no lo reconocemos, podemos inclusive pasar toda una vida sin saberlo, sin conocer realmente quienes somos.

Somos tan poco tolerante y comprensivos con nosotros mismos que cometemos un error y ¡ZAS! Nos creemos lo peor del mundo. Y es cuando la vida se encarga de colocarnos personas que también lo crean, y nos ayuden a ver la forma en que nos tratamos a nosotros mismos.

Louise Hay dice ”Te has rechazado toda la vida y no te ha funcionado…prueba con aceptarte y observa que pasa”

¿Recuerdas que de niño podías ser cualquier cosa?, todos los lugares que ibas a visitar, todas las cosas que harías, de niño jamás te detuviste a pensar ¿Qué pensarán los demás de mí?, ni un minuto te pusiste a pensar si ibas a ser exitoso o no… ni siquiera sabías que era eso… Las posibilidades eran infinitas… luego nos enseñaron la ”realidad” de que no se puede andar viviendo de sueños y de que con los ellos no se come.

Recordar quienes somos es recordar lo que yace en lo más profundo de nuestro ser que sabe que siempre hacemos lo mejor que podemos, ese yo que no usa caretas que siempre expresa lo que siente porque no sabe ser otra cosa más que ser el/ella misma. Recordar quienes somos es recordar que tal y como somos, somos perfectos que no hay nada que lograr, nada que alcanzar, que no necesitamos ser mejores… simplemente ya somos.

Meditación para el niño interior

¡Gracias!
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