Venezuela, ¿Quedarse o irse? El día a día en mi país.
Hola, mi nombre es Maribel, tengo 18 años y soy venezolana. Estuve pensando en sobre que escribir hoy, tenía la mente en blanco hasta que recordé una pregunte que recibí el día de ayer, ¿Qué piensas sobre irte del país?, quizá para muchos suene ridículo pero yo me quiero quedar en Venezuela, aún hay cosas por terminar, quiero completar mis estudios aunque por cómo van las cosas todo apunta al cierre de la universidad en una dos años aproximadamente; sí, muchas veces he pensado en irme pero aún no quiero abandonar, no porque piense que algún alto mande vaya a resolver las cosas que actualmente que ocurren, creo que principalmente es por un apego a mi tierra, es un poco ambivalente la verdad, querer quedarte pero a la vez querer irte.
Quiero comentar lo que se siente vivir acá.
Actualmente irse es una de las mejores opciones, estar en Venezuela es sentirse estancado, es como estar en un pantano. Imagina por un momento: estas en un pozo el cual solo te absorbe de poco en poco, quieres salir, buscar una opción, algo que te libere, vez alrededor y lo único que hayas es suciedad y putrefacción, te sientes ahogado, la nausea te consume, algo así se siente estar aquí. Estar de pie en un mismo lugar logra ser sofocante, ver alrededor solo te deprime. Un ejemplo, hace unas semanas estaba en la ciudad de Caracas esperando que el semáforo cambiara de rojo a vender, miraba hacia los lados, y lo único que lograba ver era un hombre suplicando por algo de comida, con la voz desgarrada mientras los transeúntes lo ignoraban al pasar, mujeres y hombres registrando basureros en busca de algo que comer, calles sucias y niños en mal estado, estar solo esos segundo parada allí y ver todo fue triste, se sintió como recibir un golpe, “¡Oye!, mira, este es tú país”.
Uno de los factores por el que se evitar salir a las calles es por el pavor que te invade cada vez que tú o algún familiar va a algún lugar. No tener ni la más mínima idea de lo que ocurrirá, preguntarte “¿Hoy me robarán?”, “¿Lograre llegar bien a mi hogar?”, ver una persona e inmediatamente desconfiar de ella, ya no es solo robar por algún objeto material, es por cualquier cosa que puedas tener, ya sea comida, algo de efectivo, prendas de vestir o algo de lo que puedas sacar aunque sea un poco de valor… No solo nos afecta la delincuencia, también el transporte, cuidar atentamente el efectivo, ¿Será que esto me alcanza para la semana?, ¿Habrá transporte?, ¿Me tocara agarrar camioneta pirata?, “Si gasto demás en el pirata pierdo el efectivo de la semana, pero si no lo hago no lograre llegar a mi casa” ¿Cómo hago?
Una interrogante que surge al decidir quedarse es: ¿Quedare solo yo aquí? Todos se marchan en busca de una vida mejor, un futuro, profesores, estudiantes, familiares, amigos… Ocurren cierres de universidades, colegios, liceos, por falta de personal educativo, no solo nos vemos afectados por escases de comida, también por una falta de educación, la nueva generación venezolana crecerá en la mediocridad. El pueblo está dañado, está contaminado… Quizá me desvié un poco del tema principal, en algún momento daré mi “reseña” sobre en lo que se convirtió el pueblo venezolano (Hey, lo sé, no todos los venezolanos son así, no trato de generalizar), pero será en otra ocasión, espero te haya agradado el post, ¡Hasta otra!
Es la realidad de muchos Venezolanos. Yo creo en Venezuela aunque esta se este cayendo a pedazos, es como por un problema familiar me vaya de mi casa. Es ahorita donde nuestra patria más nos necesita. Saludos
Así es, saludos.