Concurso Elocuencia Desnuda

Aunque quise alentarte en busca de nuevos horizontes,
aunque me vieras llevando mi mejor sonrisa, lo sabías.
Sabías que algo no iba bien.
Junto a mi corazón se quedó mi paz mental y mi cordura,
Mi cabeza vuelta un nudo pensando en que pasaría después,
en donde quedarían las promesas que hacemos al estar enamorados,
en que todo lo que vivimos quizá sería parte sólo de un común pasado
y no de un futuro planeado...

Creí tenerlo controlado. Fué casi imperceptible durante muchos meses,
pero tu ida sólo se postergaba y más ansiedad me generaba.
Ya no habían formas sutiles de hablarlo, era mi paz mental en juego.
Tu sólo engañabas con benevolencia mis demandas con excusas de pendientes antes de tu partida,
en el fondo yo lo sabía, la realidad era otra, tu no querías irte.

Hoy puedo entender por que lo hiciste, terminar una relación mientras aún amas no parece tener mucho sentido.
Pero, en este punto: ¿que sentido tienen las cosas?

Igual lo sabes, una gran parte de mi estará en tu maleta de viaje.
Espero al menos ir en tu equipaje de mano
para acompañarte de cerca en tus primeros pasos por nuevos caminos.
Y aunque tu te vas y yo me quedo, espero que nuestros caminos vuelvan a juntarse,
y finalmente ser como siempre nos llamamos: compañeros de vida.

Ojalá esa calidez que sentimos al abrazarnos,
nos acompañe cuando estemos lejos, pues sabemos que es duro decir adiós cuando se ama y
en ese calorcito esperaría conciliar algo de sosiego.

Ojalá y ese abrazo de despedida no sea el último que nos demos,
Ojalá y este amor libre, sincero y maduro sea verdadero. Mi pedacito de cielo.