Genial articulo de verdad. Lo leí hace unos días y me obligó a bajar el PDF del Pim Pam Pum que me dejé robar amistosamente en el liceo. Sus portadas me horrorizaban del 95 al 96 cuando lo veía en los kioscos siendo una niña, pero me enganchó del 97 en adelante cuando todas las semanas iba al kiosco ligando que la portada no fuera tan soez para no ganarme una mala cara de la señora que atendía. Con Urbe aprendí todo lo que debía y no debía saber y que nadie me iba a explicar, a su vez yo esparcía conocimiento de calle en mi salón. Con Urbe me arriesgué a caminar sola con 13 o 14 años desde el recién inaugurado Sambil hasta el CCCT buscando la bendita franela que vendían en Neutroni y me eche una buena perdida y casi paro en la autopista que divide ambos C.C. Con Urbe me entere de cuentos tan añejos como el caso Vegas-Perez hasta como hacer frente a un eventual Y2K, pasando por cualquier terminología sexual o como saber todo sobre un Rave sin haber nunca asistido a uno. Hice torres y torres del semanario y aun no me explico como mi mamá no les metió candela.
No se en que tiempo me desprendí de el ni por qué exactamente, pero el tiempo en que lo tuve valió 100% la pena. Gracias por los gratos recuerdos.