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Hoy voy a hablarles de la rutina que cumplo cada día desde hace ya tres años, estudiando mi carrera universitaria: Derecho. Lo bueno, lo malo, algunas cosas interesantes y que aprendí hasta ahora.

➢ Leyes y Materiales

Aqui hay unas fotos de las cosas que llevo todos los días, para todas las clases y que nunca saco de mi bolso. Por que aunque no vea la clase en donde use una ley especifica, es posible que algún profesor quiera resaltar un articulo de leyes de otras clases, así que hay que llevarlas siempre, todas. Estas son las que he usado desde que comencé a estudiar, pero sé que hay más que al pasar de los años debo añadir a la colección, solo que aun no las compro porque son de clases que veré en los últimos dos años.

También los temarios, libretas, lapices y resaltadores, y los objetos personales, contando claro, unos audífonos y computadora. (que olvidé poner en la foto)

➢ El comienzo del día

Mis horarios de cada día comienzan a las 7:00 AM, así que debo salir de casa al menos a las 6:30 AM para poder llegar a tiempo, porque los profesores se ponen algo difíciles con las horas de entrada, y puedes quedar afuera si llegas al menos unos diez o quince minutos tarde. Bastante molesto, si. En otras universidades sé que la hora de entrada varía desde las 8:00 AM hasta incluso más tarde, pero supongo que en mi universidad eso no es una opción. Se aprovechan muy bien las horas de la mañana.

Aqui una foto del camino por el que paso todos los días, algo movida porque estaba en el auto, claro. Pero pueden hacerse una idea de las calles, como son por las mañanas.

Al llegar al edificio, nos encontramos con claro, la entrada y el pasillo de entrada que lleva a las escaleras, pero donde esta también la biblioteca, un par de baños, los cuartos de servicio técnico, unas oficinas a las que nunca entré, también las escaleras para bajar al estacionamiento subterráneo de los profesores, un cuarto de fotocopiado, el área de los vigilantes, un cuarto de computación, un cajero, y por ultimo, la cafetería.

Esta universidad cuenta con cinco pisos, y es fácil perderse por lo grande que es. El primer año lo hice muchas veces, pero ahora conozco los pasadizos secretos por los que debo y no debo pasar para llegar a tiempo.

Siempre que paso por ahí, como es tan temprano, la biblioteca esta cerrada (como pueden ver arriba, las puertas de vidrio con luces apagada) y todo solo y apagado, así que solo voy directo a mi salón en el tercer piso, el piso de Derecho.

Aunque hay tantos estudiantes de esta carrera, que generalmente algunas secciones, como las de los primeros años, están en otros pisos de otras carreras, esparcidos. Incluso hay secciones que no tienen un aula fija y deben entrar siempre a las que estén desocupadas al momento, lo que tengo mucha suerte de no sufrir, porque seria una pesadilla.

➢ Mi aula

Yo normalmente me siento del lado de donde están mis amigas ahí paradas, (si pueden ver bien, ahí esta mi bolso), porque del otro lado hace mucho frió. Ademas los profesores tienden a preguntar más del otro lado por alguna razón, y yo prefiero solo escuchar en tranquilidad y copiar mis clases.

El promedio de clases que veo al día son tres, cada una de dos horas aproximadamente. No sentí correcto tomar fotos cuando los profesores hablaban, así que no lo hice. Sin embargo, este día que tomé las fotos, había tocado una de mis materias favoritas, Medicina Legal, y de la información que la profesora nos proporcionaba, logré sacar un par de imágenes rápidamente:

Luego hay otras clases donde solo debemos copiar y leer artículos para interpretarlos... y en eso básicamente se acaban las horas de cada día. Leer, investigar información para las clases en la biblioteca, hablar con compañeros en las horas libres, y esperar a que termine el día para irnos.

Es esto en lo que se resume uno de mis días, que cumplo cada mañana, de lunes a viernes. Estudiar y aprender cosas cada día, esperar que algo interesante pase, y pasar el rato diariamente con los amigos que se hace al estudiar juntos.

Es más fácil ahora que me acostumbre, lo de leer, interpretar y hablar frente a muchos cuando te lo piden los profesores, pero sigo trabajando en eso hoy. Quiero creer que cada día me vuelvo mejor en ello, pero quien sabe, siempre hay alguien mejor. Lo importante es disfrutar o tratar de disfrutar lo que haces cada día, buscarle la vuelta para hacerlo más divertido, y quizá al final del día haber aprendido algo totalmente nuevo.

¡Gracias por leer!

Nos vemos en un siguiente post