Habilidades directivas y Coaching: Como ser un buen Líder y que no te odien por serlo
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Las habilidades directivas, es el conjunto de capacidades y conocimientos que una persona posee para realizar las actividades de administración y liderazgo en el rol de gerente o líder de una organización. Para que una persona que ejerce un papel directivo sea exitosa, debe tener en cuenta los tres grupos de habilidades gerenciales, comenzando con las habilidades técnicas que involucra el conocimiento, técnicas o herramientas propias del cargo o área específica que ocupa. La segunda a tener en cuenta son las habilidades humanas, que se refiere a la manera de interactuar efectivamente con las personas. Y, por último, las habilidades conceptuales que trata de la formulación de ideas, entender relaciones abstractas, desarrollar nuevos conceptos, resolver problemas de manera creativa.
Entre todas las actividades, funciones y roles directivos que se ejercen en una organización, se identifican una serie de habilidades, entendiéndose como capacidades adquiridas por los directivos a través de la experiencia y la práctica. Ninguna habilidad es excluyente de las otras, si no que todas son útiles y necesarias para la formación de un buen directivo. Cabe destacar, que todo gerente, o quien aspire serlo, debe estar en una constante actualización y mejora de sus habilidades gerenciales. El liderazgo es una parte fundamental al momento de ejercer el cargo de directivo, la cual se necesita tener muchas cualidades de gestión y de administración.
El coaching es una de las directrices de las habilidades directivas, esta se trata de la práctica profesional, para la búsqueda de logros significativos tanto en la vida personal como en la profesional. En otro contexto es una competencia que ayuda a pensar diferente, para tomar acción efectiva y con responsabilidad hacia tus objetivos, mientras crece la imagen que tienes de ti mismo. El coaching está focalizado a “ayudar a aprender”, el coach es el facilitador y el coachee es el cliente o guiado, la tarea del coach no es decir que es lo que se tiene que hacer, ni juzgar y mucho menos dar consejos, la persona quien ejerce dicho rol cumple con el papel de guía y líder, su objetivo es hacer preguntas que estimulen a reflexionar, a recapacitar, a poner en cuestión las creencias favoreciendo el desarrollo y crecimiento personal.
Dicho proceso consiste en liberar el potencial de una persona para el desarrollo de su capacidad de aprendizaje, en el logro de sus metas, convirtiéndose en una mejoría en el desempeño de sus responsabilidades y así se transforme en maestro de sí mismo. Como se ha mencionado, el coach es un líder, ya que es esa persona que conoce bien a su grupo de trabajo, este debe ser capaz de generar motivación inspiradora, crear un ambiente de confianza, dominar competencias emocionales y corporales.