Otra historia macabra de un país saqueado y profanado

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Me llama un amigo:

-Epa, que tal? cómo está la vaina ? Féliz año. Le digo

-Bueno..... aquí..... Feliz año

-Qué pasó?

-Bueno... mi tía Mercedes se murió el 31

- No puede ser?.... ¿que antojada la doñita no? ( pensé Ups...) Mi sentido pésame, estaba enferma?

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- Si estaba en el hospital y muy viejita, murió a las 2 de la mañana, pero ese no fué el peo. El rollo fue que, para entregarla se tardaron hasta las 7 de la mañana y había que hacer todos los trámites porque sino, no daba chance de enterrarla a las 11 am que era la única hora que la podían recibir en el cementerio.

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- Y entonces?

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-Entre el llanto por la muerte de la tía, que era muy querida por ser la que siempres estaba ante las dificultades de cualquier familiar, y el trajín de ir de aquí para allá y que nos atendieran, eso fué agotador. Cuando por fin llegamos al cementerio, al sitios donde la íbamos a enterrar , que era una parcela donde estaban otros 2 tíos, nos encontramos que estaban vacías, habían hurtado la osamenta y alrededor lo que había era puro monte y basura, al preguntar que pasó, nos dijeron, con mucha naturalidad, que eran los santeros para sus brujerías.

- ¿Qué es eso?..¡qué impotencia!!!

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- Bueno eso no termina ahí...las personas que se ocuparían del entierro nos dicen que nos apuremos porque ellos ya se van y que además le teníamos que conseguir cemento y arena porque ellos no tenían. Te podrás imaginar un primero de enero nadie está abierto y mucho menos una ferretería y si ocurre el milagro de conseguir una, hace tiempo que aquí no se consigue cemento.

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-Y qué hicieron?

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-Bueno... comenzamos a llamar a amigos para ver si tenían cemento o si conocían a alguien que estuviera construyendo para que nos lo prestara. Hasta que por fin se logró la colaboración. Al llegar el cemento aquel acto fue conmovedor no porque estuviera lleno de espiritualidad sino como la lanzaron en ese hueco lo más rápido que pudieron y nos dijeron que, lo que pasaba, era que estábamos corriendo peligro porque los malandros estaban rondando que teníamos que retirarnos lo antes posible porque corríamos peligro.

Y te fuiste inmediatamente? ...... me contesta ya con la voz quebrada:

-Si, pero antes quise pasar por la tumba de mi mamá, encontrándome con la sorpresa que su tumba también había sido profanada.

Ya en esta parte de la conversación ...no supe que decir. Se cortó la comunicación (había sido un milagro que no se interrumpiera antes), lo llamé varias veces y no se conectaba, el me llamó nos conectamos y se volvió a caer y me quedé pensando por lo que habían pasado sentado frente a la computadora por lo que, decidí compartir esta historia.

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Todavía no se describir el sentimiento que tengo para poderlo compartir. Venezuela está mal, pero no mal como lo pensamos, está peor que eso. La profanación es una falta de respeto a lo sagrado, a lo religioso, pero aquí la profanación es a todo lo que representa nuestro país y no hay organismos a quien acudir ya que sabemos que es una gestión estéril ante el verdugo indolente.