Tierna voz, calmada, tímida, suave y de cariño sincero
Así quería que fueras, una chica de buenos sentimientos,
Cada sonido que emitías retumbaba en mi pecho
como una orquesta en pleno concierto.

Me fui acercando a ti,
Y me culpo a mí en lo poco detallista,
En no darme cuenta ni de vista,
Que tu vestido tenía escote en la espalda,
Cuando coloqué mi mano en ella me sorprendí,
Vi la gloria con lo que mis dedos llegaron a sentir
Y de arriba a abajo,
Como si sintieras lo mismo que yo,
Imaginando como estaba recorriendo tu alma.

Palabras iban, palabras venían,
Oraciones de como éramos cada uno,
Pero nuestros cuerpos eran más rápidos que nuestra propia velada
Ellos se sentían más a gusto que nuestra razón,
que decía que era muy pronto para algo más.

Mientras hablábamos nos acercábamos,
Mi mano donde estaba aprovechaba para acercarla mas
Y ella lo usaba como excusa para hacerlo.

Un beso en el cuello, erizando la piel,
Era suficiente para comprender que seguramente,
En otra vida nos conocíamos,
Y nos conocíamos muy bien.
Nos miramos, nos besamos,
Nos enamoramos con un beso,
Es algo difícil de creer, pero el amor es más que eso.

Más que la razón, más que las normas,
Más que ser educado,
Cuando se está enamorado las locuras son la nueva consciencia
Que permita ver la lógica en nuestros actos,
Por más inefables, incongruentes, incoherentes
Que los demás creen que sean.

Enamorar es una palabra grande,
Como siempre y nunca me decías,
Pues estoy enamorado de ti desde siempre,
y no pretendo alejarme de tu vida nunca.

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Tu camino creías que estaba escrito,
Que por ver la ruta sabías a donde ir,
Pero el horizonte esconde a donde vas,
Ven conmigo y te enseñaré a volar,
Donde no necesitemos horizontes que visualizar,
El infinito es un lugar extraño si se está solo,
Y compartirlo contigo de algún modo,
Será el mejor final para dos almas en busca de algo más.

Te conocí,
Aunque no planeaba hacerlo,
Te conocí cuando tal vez no era el mejor momento,
Que nuestros destinos estaban bien sin uno, sin el otro,
Pero, te conocí...