Cuando evolucionamos como persona y buscamos ese gran amor que cumpla todas nuestras expectativas, definitivamente nos sentimos plenos y satisfechos. Pero aún creyendo que es el único que puede existir, cuando nace un hijo no hay amor que sea igual o que se compare. Es un amor puro que va más allá de lo previsto. Cuando te entregan a ese ser que se formó en tu vientre durante 9 meses, porque desde el primer día que sabes que vas hacer mamá, lo cuidas con mucho esmero y cariño como un tesoro. Decidí colocar la foto de mi hijo conmigo por que es lo más grande y especial que tengo en mi vida aparte de mi primer hijo "Luis Fernando". Ellos son todo para mí, son mis dos amores.

Hay diferentes tipos de amor, pero el de madre es realmente especial y único. Un amor que no te cansas de cuidar y querer. Es un amor que cuando tu hijo se enferma no te importan si duermes mal con incomodidades o no comes. Es algo que te úne para toda la vida, como una bendición que te va acompañar siempre a donde quiera que vayas.