Nueva Zelanda

Conocida como el rincón más bello del mundo, Nueva Zelanda ofrece a la gente naturaleza intacta, actividades recreativas y un rico patrimonio indígena que ha perdurado a lo largo de los siglos. Nueva Zelanda es la tierra de los celosos, un mundo de maravillas con entusiasmo y pasión desde los rascacielos de Auckland hasta los volcanes del Parque Nacional Tongariro. Nueva Zelanda es nirvana.

Parque Nacional Tongariro

Uno de los primeros Parques Nacionales, Tongariro se proclama con tres volcanes activos, Tongariro, su homónimo, así como Ruapehu, y Ngauruhoe. Entre el majestuoso Lago Rotopouamu y el cercano Monte Pihanga que contempla una rica mitología de su patrimonio cultural maorí, esta área florece con biodiversidad y se agregó al parque nacional en 1975. El Departamento de Conservación ha establecido un proyecto comunitario para ayudar a proteger esta UNESCO Patrimonio de la Humanidad y la naturaleza venerada de esta tierra. Se anima a los visitantes que buscan recreación a esquiar en Whakapapa, y prueben el "tramping" local que está haciendo caminatas durante la noche con equipo sostenible en todo el país de Nueva Zelanda.

Escalada de la isla sur y boulder

Los entusiastas de actividades al aire libre que buscan hacer algo de escalada y boulder son animados a visitar la isla sur. La colina del castillo, conocida por sus rocas de piedra caliza y rocas de piedra caliza de fama mundial, fue nombrada "Centro espiritual del universo" por el Dalai Lama y exhibe riscos de piedra caliza que ofrecen una variedad de áreas de boulder y picnic de fácil acceso. Situada en el extremo norte de la Isla del Sur, Paynes Ford es el lugar al que ir para las rutas deportivas de piedra caliza con muchos voladizos técnicos acompañados de impresionantes vistas. Templos de piedra es la ruta resaltada. Un impresionante deporte de 5.9, esta ruta te ofrece jarra gratificante mientras cruzas tu camino hacia la cima de la pared de 85 pies con vistas a montañas y ríos.

Auckland, una ciudad como ninguna otra

Una ciudad excéntrica con una fusión de culturas asiáticas, polinesias y europeas, Auckland es verdaderamente única. Definida por una mezcla ecléctica de maoríes y culturas occidentales, Tāmaki Makaurau (Auckland en maorí) es una ciudad juvenil que abarca maravillosas maravillas naturales entre una metrópolis bulliciosa con toneladas de museos, restaurantes y bares. Con la mayoría de sus habitantes en sus primeros treinta años, Auckland ha creado una cultura enérgica que es conocida por crear su propia música y deportes que están a la par con otras naciones occidentalizadas. Su equipo de rugby es una gran parte de su cultura, además de que Nueva Zelanda tiene sus propios artistas, músicos y diseñadores de moda de renombre. Si está buscando un poco más de energía que el majestuoso campo, Auckland seguramente realizará cualquier esfuerzo.

Karekare, Nueva Zelanda

¿Buscando un lugar para escapar de la vida de la ciudad de Auckland? Karekare es el lugar para ir. Karekare es un asentamiento tranquilo donde las colinas de Waitakere desembocan en las playas de arena negra del mar de Tasmania, y ha ganado mucha fama por su interpretación en las canciones y películas populares de los medios. Si bien las expectativas se han elevado, la veracidad de su tierra aún logra superar las suposiciones de su belleza y su vitalidad que alimenta la fortaleza y la serenidad de cualquier espectador. Estas playas impresionantes se crearon cuando la lava caliente se enfrió rápidamente por el océano alineado. Otro espectáculo son las impresionantes cataratas de Karekare, que están a solo un minuto a pie del estacionamiento de la playa de Karekare.

Fiordland National Park

Ubicado en la sección más al sudoeste de la Isla Sur de Nueva Zelanda, el Parque Nacional de Fiordland es una maravilla para ser testigo. Es el parque nacional más grande de Nueva Zelanda y es más conocido por su enorme fiordo que trasciende hasta 2,000 metros junto a gigantescas cascadas que hacen estas espectaculares caídas en los fiordos negros. Nueva Zelanda, segundo lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, estos fiordos tallados en hielo son verdaderamente una maravilla del mundo. Milford Sound, Doubtful Sound y Dusky Sound son algunos de los más dramáticos que se combinan con los enormes picos de las montañas. Con la posibilidad de poder esquiar un día y luego practicar snorkel, Nueva Zelanda ofrece diversión durante todo el año para personas de todos los ámbitos.

Gusano cuevas de Waitomo

Waitomo, una palabra maorí, "wai" que significa agua y "tomo" que significa entrada a un hoyo es el nombre que da al fantástico destino mundial de cuevas ubicadas en la Isla Norte de Nueva Zelanda. Lo que hace que estas cuevas sean tan especiales no es solo su fantástica geología de piedra caliza que se ha creado durante más de 30 millones de años, sino también sus habitantes nativos. Arachnocampa luminosa, o más comúnmente, luciérnagas cuelgan de las paredes del techo e iluminan las notables formaciones de piedra caliza. Estas maravillosas criaturas emiten una luz brillante que da vida a este laberinto de un mundo perdido. Hay varias visitas guiadas que llevan a los visitantes a través de muchos niveles de las cuevas subterráneas, donde serán testigos de plantas y animales extraños y se sorprenderá con las habitaciones de la catedral y las grutas que se encuentran debajo de la hermosa superficie de Nueva Zelanda.