Las sombra de la ciudad (capitulo 3)
Hola amigoos!! Aquí les traigo la continuación del capítulo anterior
Capítulo 2 https://steemit.com/novel/@joskar/las-sombra-de-la-ciudad-capitulo-2
El tormento de mis sueños no me dejaron descansar, al igual que siempre me levante muy temprano, la diferencia es que ahora no tenía que hacer la rutina diaria de aquel infierno, ahora que lo pensaba esta era mi primera mañana libre, doña gloria ya se había levantado, deduje por su atuendo y sus ojeras que se la pasó toda la noche despierta junto a Moinsés ya que el tenia la misma cara de cansancio.
—Toma este café te quitara el sueño —la señora gloria me dio una taza de metal blanco y el borde de la boca azul oscuro y en su centro una flor roja, tome un sorbo de ese tal café pero mi cara tomo una mueca extraña, debido al amargo sabor que lo hacía poco agradable a mi paladar.
—Hijo ¿no te gusta el café? Porque esa cara que has puesto es peor que la de novia arrepentida en boda ¡Jajajajaja!
—No es eso doña Gloria es que nunca he probado esta bebida ¿esta como algo amarga y fuerte? —la señora al escuchar esto se voltio hacia unos de los estantes y saco un recipiente que decía azúcar.
—Toma hijo échale azúcar para que te endulce la vida — eche dos cucharada de azúcar y tome otro sorbo el sabor cambio de una forma tan radical ahora era muy agradable.
—Haber hijos mío, hoy decidí no abrir así que pueden quedarse a descansar, traten de no salir muchos hay policías en la calle por lo que paso anoche, mientras iré a mi casa a bañarme, les hice empanadas de quesito, hay unas 10 en la mesa 5 para cada uno, no tardare en volver.
Al irse Moinsés y yo nos sentamos a comer, hubo un silencio entre los dos tan grande pero no me importo solo quería devorar esas empandas que estaban muy ricas.
—Enrique tenemos que planear que haremos ahora, no conocemos nada sobre vivir en libertad, mientras contaba el dinero con doña Gloria anoche me las arregle para sacar información de cómo se vive sin que sospechara nada de nosotros.
Lo mire para asistir con mi boca llena de comida.
—Contamos una cantidad exacta de 70mil bsf de lo cual le di a ella 10mil bsf y el resto aún está en el bolso, ella me comento que con esa cantidad podemos buscar una casa para vivir, tenemos que buscar trabajo. —lo mire con cara de sorpresa, pues él sabía que yo no entendía nada de lo que hablaba. —Es cuando haces una labor para ganar dinero —me aclaro.
— ¿Y de que podemos trabajar nosotros? —sabía que el de seguro ya lo había pensado pero solo se quedó en silencio y continuo comiendo, después de terminar la comida me puse a escuchar con atención y afuera había mucho ruido.
—Moinsés es nuestro 1 día de libertad ¿no extrañas a Yelena? —Al parecer mi pregunta lo tomo de sorpresa.
—Sabes Enrique yo también la extraño pero ya no está, de nada sirve que pienses tanto en ella —como podía decir eso, Yelena era nuestra amiga con la que habíamos soñado tantas veces vivir esta libertad, rápidamente me llene de rabia.
— ¡Como mierdas puedes decir eso Moinsés!
—Es la verdad Enrique ya está muerta déjala en paz —lo tome por el cuello de la franelilla y le di un puñetazo.
— ¡No vuelvas a decir esa mierda no ves que está muerta gracias a nosotros, ya que la abandonamos! —grite lleno de furia y en ese momento regreso doña Gloria.
—Dios mío santo que le sucede a ustedes dos cálmense de una vez, por dios los dejo un segundo a solas y están peleando —estaba lleno de rabia tanto así que preferí apartarme hacia una esquina a estar solo.
—Ustedes dos montaron a noche un gran espectáculo, hay policías en todos lados debido a los 15 muertos y nadie sabe quién los ha matado —doña Gloria siguió hablando pero no le prestaba atención, aún estaba molesto por lo que dijo Moinsés. —ustedes dos ya dejen de portase como niño no sé porque se peleaban pero no creo que tengan que estar así.
Moinsés se acercó a ella para conversar pero a mí no me apetecía ir, aún estaba molesto y hasta que no me calmara no me movería de esta esquina.
—Haber Enrique ya levántate ¡lo siento! no quería hablar así de Yelena a mí también me duele que no esté acá con nosotros —por primera vez pude observar un poco de esos sentimientos de Moinsés, me levante sin decir nada y camine hacia ellos.
—Hijos es mejor que salgamos a caminar, la policía está muy tensa por todas estas 15 joyitas que pelaron gajo.
Salimos del loca aun no yo no quería hablar, fuimos caminando por un espacio con tiendas laterales.
—Este es el bulevar de sabana grande, al parecer ustedes dos no son de aquí, iremos a visitar a un amigo que está enfermo.
Algo no estaba bien desde que salimos, observe que nos miraban mucho y nos estaban seguían, busque la 9mm que la tenía en la cintura, mire a Moinsés y el asistió con la cabeza, caminamos durante mucho tiempo sin embargo cada vez nos seguían más hombres.
—Aquí es el lugar esperen acá fuera un momento hijos mío.
Algo pasaba, habían dejado de seguirnos pero aun presentía que nos observaban, el lugar era un callejón muy solitario de esos en los cuales sucede cualquier problema y nadie se enterara.
—Pueden que sean hombres de Víctor —susurro Moinsés.
—No lo creo porque ya nos fueran atacado pero algo no está bien, me he dado cuenta que fueron aproximadamente 30 hombres los cuales se limitaron a seguirnos y observarnos, creo que están tramando algo.
—Me di cuenta que cargas más de un arma ¿de dónde sacaste esa 9mm? Porque solo tenías mi 357 anoche.
—Regrese anoche por balas de esas ratas y tome una de sus armas, toma estas municiones ya no debes tener suficientes balas en tu 9mm, ¿es la de Yelena verdad?
—Si con este 9 mm la voy a vengar, matare a Víctor —deje que mi rabia hablara por mí. — ¡Lo siento por el golpe, me deje llevar!
—No te preocupes ya paso pero no me pegues tan duro a mi joder, aun me duele la cara —sobándose la cara sonrió.
Doña gloria ya llevaba un rato hay dentro, sin embargo no sentíamos aun observado, Moinsés me dio dos peine llenos de balas y 7 balas suelta aproveche que el lugar era solitario para cargar el peine que tenía mi arma.
De repente sale doña gloria con una mirada tierna.
—Bueno nuestra visita se acabó, de verdad fue un placer conocerlos pero solo dios sabe porque hago esto.
Al instante salieron hombres por todo lados, no pude contar cuantos eran en total, pero habían una diferencia con estos individuos a los simple malandros de anoche, esto llevaban armas de calibre alto entre ella k-47 y MK 47. Vestían trajes negros con corbatas y se veían que si estaban organizados, rápidamente Moinsés y yo apuntamos sabíamos que no teníamos la menor oportunidad de salir vivos de allí pero no moriremos tan fácilmente sin luchar.
—Calma chicos —se escuchó bastante voz grave que salió de la casa donde doña Gloria había entrado anteriormente.
—Estos son los chicos que me comentaste por teléfono gloria, mmm así que son estos los responsable de esas 15 ratas de cloacas, ¡interesante! —el hombre salió de la casa, tenía buen físico, vestía de traje gris, cabello plateado, piel blanca y ojos azules que al verlos transmitía poder. al Alzar su mano todos bajaron sus armas.
— ¿Qué significa esto señora gloria deme una rápida explicación ante de que yo le dispare a usted? —dijo Moinsés apuntándola en la cabeza pero esto solo hiso que los hombres volvieran a apuntarnos.
—Bajen su armas todos, hasta ustedes dos —los hombres volvieron a bajar sus armas pero nosotros no, no dejaríamos que nos agarraran tan fácil.
—Crees que esta vez sí sean hombres de Víctor.
—No sé pero no me gusta nada esta situación estamos rodeados y son muchos no tenemos forma de escapar, así que pronto nos reuniremos con Yelena de nuevo. Si aparece Víctor asegúrate de vengarla, vacíale esa 9mm en nombre de ella —el hombre solo nos observaba sin decir ni una palabra,hasta que por fin dijo algo.
—Está bien Gloria parecen buenos los tomare, gracias por traerlos hacia mí el dinero que solicitaste será llevado a ti en la tarde.
—Joder vieja no has vendido serás una grandísima hija…—interrumpieron a Moinsés
—Cállate tú no sabes nada, además solo dios sabe porque hago esto —no podía creer que nos vendieran y que sea la señora que nos dio su mano y nos ayudó.
—Los quiero en la organización, vete de una vez Gloria que ya no tienes nada que hacer aquí
—Se quedara con nuestro dinero también jodida vieja, ojala le de diarrea con hipo y no llegue al baño —esa era una frase de Yelena hasta en mis último momento la recordaba pero no era momento de recordarla, Moinsés me miro con una cara de amargura, de seguro pensó que era un idiota al decir esas estupideces, me sentí estúpido.
De repente el hombre de traje se fue y los otros hombres también y al instante callo una granada cegadora a nuestro pies, quede ciego trate de buscar a Moinsés aun estando un poco aturdido pero lo único que sentí fue un gran golpe en la nuca que me lanzo al suelo, ya recuperando un poco de la vista vi a Moinsés también en el suelo y me desmaye.