Colombia descarta cerrar la frontera con Venezuela: “No es la solución”
El canciller Carlos Holmes Trujillo y el director de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, aseguraron que su país no va a cerrar la frontera con Venezuela y descartaron que esta medida pueda disminuir el flujo de migrantes hacia el vecino país.
“La política del presidente Iván Duque en esta materia es continuar actuando con criterio humanitario, con sentido de solidaridad, de gratitud histórica”, afirmó el canciller Holmes.
En ese sentido, Krüger agregó que la política del gobierno del presidente Iván Duque es de flexibilización y más si se está hablando de seres humanos.
Explicó que cerrar la frontera, a través de un decreto, no soluciona los problemas que trae la migración venezolana a Colombia, que está alrededor de 1.500.000 personas.
“El hecho de cerrar una frontera no es cerrar una puerta. No es cerrar la puerta de la casa o cerrar una finca. Este fenómeno no se soluciona cerrando la frontera con un decreto. Lo que va a generar es que esta migración va a seguir llegando a nuestro país, pero no por los puntos no autorizados por los más de 2.200 kilómetros de frontera”, aseveró el director de Migración.
Krüger también dijo que esto sí sería un “gran inconveniente”, pues las autoridades no sabrán dónde están los ciudadanos venezolanos y no los tendrían identificados.
Para Holmes Trujillo, "hay que tener claro que la solución estructural al problema es el cambio en Venezuela", y agregó que "la solución es la salida de Maduro".
El director de Migración comentó que la migración “deja cosas muy positivas”, como en el tema comercial.
“En el tema comercial, preguntémosles a las agremiaciones que están en frontera cuál ha sido el incremento en estos últimos años”, concluyó el director de Migración Colombia.
Días atrás, el expresidente de la Cámara de Representantes Alejandro Chacón pidió a las autoridades colombianas cerrar la frontera con Venezuela.
Chacón alertó que se debía cerrar la frontera “debido al incremento de la inseguridad, el colapso de la salud pública y la falta de recursos de las ciudades que atienden la migración venezolana”.