Reír o fingir reír es igual, tu cerebro no reconoce la diferencia, así que manos a la obra!...

Una sonrrisa puede cambiarte la vida. Si es franca no importa si es de un amigo o de un desconocido alegrará tu día, te levantará el ánimo, te hará pertenecer a un grupo, te hará sentir parte de él.

Son muchos los efectos positivos de la sonrisa, disminuye el estrés y la presión sanguínea, aumenta la inmunidad y la nutrición de los tejidos porque les lleva oxígeno. Libera endorfinas que son las hormonas de la felicidad y que actúan como analgésicos naturales para el cuerpo aliviando dolores , tensiones, mejorando la depresión, la psicosis y la memoria porque todo lo que se relaciona con el humor se recuerda mas, te llevan a a la calma y al bienestar que se traduce en estar bien.

Desde que tenemos seis semanas de vida, desarrollamos la sonrisa, si lo ves detenidamente, un bebe tiene la capacidad de reconocer las expresiones faciales de quien lo cuida, reaccionar frente a esto y producir con su gesto sonriente una gran cascada de felicidad a quien lo rodea, en cualquier sitio y a cualquier hora.

la Universidad de Harvard reveló como reaccionaban un grupo de pacientes ancianos frente a las expresiones faciales de sus cuidadores. El estudio concluyo que los pacientes se sentían más satisfechos y su salud mental y física mejoraba cuando percibían ternura, cariño, interés y empatía en las expresiones faciales de sus cuidadores y empeoraban cuando sus cuidadores adoptaban una actitud distante.

Comienza por reír para ti mismo, que nada ni nadie empañe tu día. Dibuja en tu rostro esa linea curva que todo lo mejora y reparte el regalo gratuito de tu sonrisa, eso no cuesta nada y si no te sale, pues utiliza un lápiz