Mi nombre real es Jennifer Rodríguez. Soy de Quíbor, Estado Lara en Venezuela. Tengo 23 años y actualmente estudio diseño gráfico en la Universidad Tecnológica Superior “Antonio José de Sucre”.

Mi vida es una vida sencilla (hablando optimistamente). La situación en mi país Venezuela, como todos saben, es sumamente complicada, así que hay que sacar todas las buenas vibras que aún quedan en nuestro interior.

Cuando era niña fui música (tocaba cuatro, mandolín y flauta dulce) y artista (algo que conservo hasta hoy). Aun agradezco a esos profesores que me brindaron su mano amiga en esos momentos, pues no tenía los medios para estudiar ambas disciplinas.

Me retire de ambas cuando llegue a la edad para entrar a secundaria. A partir de allí, trabajé en un taller como ceramista para seguir estudiando. El tiempo pasó, y llegó el momento de decidir si continuar estudios universitarios o trabajar solamente, decidí continuar en la Universidad.

Unos familiares me ofrecieron ayuda, pero sólo si estudiaba Ingeniería. En ese momento tenía 16 años, lo que ganaba no era suficiente y la Universidad donde impartían dicha carrera quedaba en la ciudad de Barquisimeto, así que accedí.
En 2012 entre en la Unexpo en la carrera de Ingeniería química.

Pude decir que la Unexpo fue mi hogar por 5 años. Llevaba mis estudios y trabajo independiente con normalidad, pero algo no estaba bien. No era mala en ingeniería, pero jamás pude enamorarme de ella.

Ya en esas instancias, tenía claro las cosas que eran mi pasión. Me encantaba el arte y todo lo relacionado a las ciencias de la salud. De hecho, mi trabajo independiente era como artista (manualidades y dibujos infantiles), y a su vez estaba ejerciendo como voluntaria en la Cruz Roja Venezolana.

La situación país cada vez se complicaba más, mi situación familiar y emocional también. No veía el punto de seguir ese camino que no me daba satisfacción. En 2017 me retiré para seguir otro rumbo. Quedé para enfermería en la Universidad Lisandro Alvarado, pero debía esperar 1 año para entrar.

En el entretiempo, trabajé como técnico farmacéutico en una clínica, y como auxiliar de farmacia en una franquicia comercial. Seguía como artista ocasionalmente.

Al cumplirse el año, mi sorpresa fue que debía seguir esperando 😒 😬
No podía más y decidí estudiar diseño gráfico, carrera que sigo hasta hoy.

Tengo amigos que hoy en día me preguntan si me arrepiento de las decisiones que he tomado. No ha sido fácil, y he pasado por muchas dificultades. La respuesta es NO. Creo firmemente que todos cometemos errores, pero siempre hay segundas oportunidades para aprender, crecer y seguir adelante.

Hace poco, conocí esta red social y de inmediato quise probar mi suerte acá. Una forma de mostrar lo que hago, y además ayudarme para continuar mis estudios.

Mis trabajos quizás no sean tan buenos, pero es cuestión de mejorar con la práctica 🙊

Si te ha gustado, te invito a ojear mis trabajos😍 y no olvides apoyarme.