Qué reconfortante se ve esa sopa dominguera 🍲✨. Me encanta cómo describes cada paso con tanto cuidado desde dejar la cáscara de auyama por sus nutrientes hasta ese toque final de cilantro que seguro aromatizó toda la casa 🌿, aunque a yo la seguiré haciendo si la concha jajaja. Es verdad: una buena sopa no solo alimenta el cuerpo, sino también el alma, especialmente cuando se comparte en familia. Y ese truco de agregar los ingredientes según su textura es pura sabiduría culinaria! 👩🍳 Gracias por recordarnos que los placeres más simples como un jojoto bien colocadoson los que hacen la diferencia.