Mi objeto especial

“Aplausos” es un payaso de felpa, llegó a mi vida cuando era muy jovencita, fue un regalo de mi hermano (me lo trajo de un viaje) su nombre venía cosido a su cuerpo , dos manos aplaudiendo, tiempo después supe que era la marca de los juguetes, sin embargo lo llamé así…ha estado conmigo por casi 50 años, ha sido confidente, secador de lagrimas, compartido risas y largas horas de sueños, ya que ha estado siempre en mi cama o al lado de ella.

Cuando me casé en 1998, mi mamá me comentó que ya no era bueno tener a Aplausos en la cama, que lo colocará inclusive fuera del cuarto y así lo hice, hasta que en 1999 vi la película Toy Story 2 y esa noche volvió a la habitación muy cerca de mí como hasta hoy se encuentra. Sé perfectamente que es un payaso de felpa, pero para mí aun siendo un objeto lo miro y me produce ternura además es el nombre de: mi correo electrónico, mi alias en Instagram, mi seudónimo en esta plataforma…ósea parte de mi vida.

Ya no lo lavo, creo que por el tiempo puede desaparecer, en estos años he aprendido a ser muy desprendida de las cosas materiales al entender que es lo verdaderamente importante, de hecho aplausos era parte de una colección de más de cien figuras de payasos que deseché hace cerca de dos años como consecuencia de mi vivencia interna…solo quedó él. Es capaz de evocar recuerdos de todo tipo, de allí que su valor sentimental con el tiempo se incremente y aunque ya soy una mujer muy adulta me lleva a mi niña interior siempre que le miro o lo tomo y eso lo hace significativo en mi ser interno, por ello es un objeto preferido e importante.

Invito a: @erika08 @raqueluchap77 @rashel