Llegó el domingo, día de atender la bodega, comer arepa frita y muchas meriendas.

A las 7 de la mañana mi hija comenzó a llorar, la saqué del cuarto y se calmo. Hice unas arepas fritas para desayunar. Dejé todo limpio y dormí a mi hija. Me voy a poner a lavar y se va la luz, tuve que recoger todo el ropero, le puse el ventilador a mi hija y me di un baño.

Mi hermano vino a buscar a mi hijo para llevárselo al río. No quería que fuera tan temprano y como se puso a llorar lo mande. Me acordé de la torta y me servi un pedacito con café para merendar.

Me fui a atender la bodega con mami, mi hija se paró, gracias a Dios que no hizo tanto calor y no lloró. A mami le dió por comer algo y se quedó con la niña mientras yo picaba lechosa.

Me quedé al pendiente de la bodega y mami fue por el almuerzo, frío catalana, tenía años que no la comia, prefiero el tajali, lamparosa. Mi hija comenzó a llorar y no pude ni fregar, le di un baño y se la di a papi mientras barria y limpiaba la cocina.

Me senté con mami en el porche para atender la bodega mientras mami pesaba bicarbonato, levadura, manzanilla y clavito. En eso paso un señor vendiendo tabletas de ajonjolí y mami le compro.

Se sumo mi papá y allí estuvimos riéndonos con nuestros chistes. Mami me dice que caliente café y que termine de servir el pedacito de torta que quedó y yo hice mucho caso jajajaja.

En lo que dormir a mi hija lave dos anon que me había traído papi hace días y matarile también antes de que se dañen. Como a las 5 de la tarde llego mi del río, se baño y se acostó a ver la televisión.

Para la cena hice dos arepitas para mi papá e hijo, mientras que para mi mamá y para mí jugo de lechosa con galleta de soda. Le di una lavadita a mi hija y mi hermana se la llevó.

El calor me estaba desesperando y me di un baño, luego le di tetero a mi hijo y no se durmió, tuve que salir a caminar en la calle para que se durmiera. Este fue mi día, gracias por leerme.