Para completar el relleno se fríen en aceite láminas de plátano maduro, lo que comúnmente se conoce como tajadas.

Las capas de maíz.

Para realizar las masas de maíz que serán las tapas del funche se requieren dos litros de agua, para ello lo más recomendable es usar donde hirvió la carne, pues eso le dará mejor gusto, si no llegan a dos litros se puede completar con agua comprobando luego el nivel de sal. Se agrega onoto molido para darle un color más atractivo. En este caso se separó en dos y se hicieron dos masas, una de maíz amarillo y otra de blanco, pero como antes se dijo, se puede hacer con un solo tipo de maíz.

El procedimiento es el que indica la tradición, al agua se va agregando gradualmente la harina precocida y se va mesclando hasta tener una masa homogénea y consistente. Por último y para que el funche tenga contextura y no se desarme se agregan dos huevos, como en este caso se hicieron dos tipos de masas, se añadió un huevo a cada una.

Armado y horneado.

Precalentar el horno a 180ºC.

Hecho el guiso de relleno con las tajadas y lo necesario para las capas que son las masas de maíz precocido, no queda más que armar.

Una vez aceitado el molde, de un kilo o kilo y medio, con aceite vegetal, mantequilla o la misma grasa que sobró del cochino, se acomoda una capa de masa de maíz que cubra todo el fondo y los laterales, de aproximadamente un centímetro de grosor. Lo ideal para hacerlo rápido y fácil es moldear la masa con las manos previamente humedecidas para que esta no se pegue. Es muy importante no dejar zonas muy gruesas, especialmente en los bordes pues se corre el riesgo de que no se cocine bien en esa parte.

Lo siguiente es vaciar el guiso de cochino de res en el centro y esparcirlo uniformemente por todo el interior. Colocando encima una capa de tajadas, cubriendo así todo el guiso.

Posteriormente se acomoda arriba una capa más delgada de masa cubriendo todo el pastel. La forma más fácil de hacerlo es elaborando en las manos arepas delgadas y con ellas ir cubriendo gradualmente toda la zona, luego se empareja con una paleta o cuchara humedecida. Para finalizar se le abren dos o tres agujeros para que los vapores del interior escapen y se lleva al horno por 45 minutos.

Mientras el funche está en el horno y si es que sobra masa, se puede aprovechar friendo unas ricas arepas que sirven de tentempié.

Transcurrido ese tiempo, se saca del horno para aplicarle un poco de mantequilla en la superficie y luego una capa de queso mozarela. Se devuelve al horno y solo resta esperar a que el queso se derrita, cuando esto suceda se retira del calor y se deja reposar a temperatura ambiente de ocho a diez minutos y estará listo para emplatar.

¡Buen provecho!

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Esta receta se hizo escuchando la buena música de Monsieur Periné

Fuente

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