Mi amigo
Todos llegamos a tener un amigo de la infancia que nunca olvidaremos o que aún está con nosotros, un amigo leal y divertido que está con nosotros en momentos de alegría y tristeza, de desesperación y triunfo. Cuando era pequeño, mi mejor amigo siempre estaba conmigo, yo poco salía de mi casa así que él siempre estaba en la mía, nunca llegue a ver su casa ahora que lo pienso, me fuese gustado verla, ver las decoraciones, su habitación y que comía, me fuese gustado saber que comía.
Por alguna razón mis padres no me prestaban atención cuando jugaba con él, ellos me dejaban ser feliz jugando y hablando, era todo lo que ellos necesitaban saber, tal vez me querían mucho o tal vez me ignoraban demasiado, pero aun así me dejaban estar con mi amigo. No recuerdo su nombre, no soy muy bueno recordándolos, pero estoy seguro de que él aún me recuerda a mí, siento a veces que sigue a mi lado, como las veces que comía bajo la mesa con él, las veces que dormíamos juntos, que me ayudaba a hacer la tarea, son momentos únicos.
Era muy unido a mí, incluso lo dejaron salir en una foto familiar que nos tomó algún vecino fuera de nuestra casa, pero algo pasaría con él porque a mi familia no le gusto que saliera en la foto, quemaron la foto y luego no lo vi más. No lo vi después de ir a la casa de un señor mayor que me escupió humo de su tabaco y me golpeo con unas ramas que olían muy fuerte, aunque no fueron golpes duros, no sé porque lo hizo.
A estas alturas no recuerdo su rostro, su nombre, su estatura o si quiera su forma, para ser sincero ni siquiera me acuerdo de él, esas ramas apuesto eran para hacerme olvidar, mi madre me lo contó mucho tiempo después y me dijo su nombre, pero no creo que sea bueno llamarlo así, pero lo interesante aquí, es que hay ramas con olores fuertes que te hacen olvidar que viste un duende.
Mi mamá en una ocasión me contó eso, que me la pasaba hablando solo y pedía comida para mi amigo que nadie podía ver mientras comía bajo la mesa, luego de tomar una foto familiar salio una figura a mi lado, creo que después de tanto tiempo él sigue persiguiéndome, porque la mala suerte que abunda en mí, no es normal. Espero les haya gustado el post de hoy,si tienen algún consejo para que mejore mi forma de narrar las cosas, sera bien recibido, nos leemos luego mis queridos lectores.