Me encantó leer lo que escribes y como has logrado controlar que no es lo mismo que reprimir tus impulsos para decirle a alguien lo que se merece.
A mí me pasa que intento siempre decir lo que quiero, pero dándole la vuelta para no herir a nadie y eso es bueno para los demás, pero no para mí. Es agotador, como también lo es tratar de controlar a mi madre (que no tiene pelos en la lengua) y le dice a quienes la atendemos lo primero que pasa por su mente. Muchas veces ofende o hiere y ella se queda muy tranquila y descansada.
¿Qué es lo mejor? ¿Qué se debe hacer? Yo intento mantener la fiesta en paz.
Creo que lo mejor es "Llevar la fiesta en paz". Sobre todo por nuestra salud mental. Y sí, a veces resulta agotador controlar nuestros ímpetus. Gracias por pasar y dejarme este comentario tan valioso.