The diary game. 9/03/2025. Domingo de una baseball mom.

¡Eyyy que tal!, el domingo como todos los días agradecí a mi dios por sus bendiciones, desde temprano estaba activa dado que tenía que dejar el almuerzo listo, mi hijo tenía juego de beisbol y llegaríamos a las 1:00 p.m aproximadamente. Por lo general el menú es fijo, siempre trato de preparar sopa de res o un cruzadito de carne y pollo, así que enfoqué en ello.

Un vistazo a mis plantas , me entusiasmé mucho porque la última plantita que compré en el vivero, una suculenta, todos los días me regala unas bellas florecitas, y este día no fue la excepción, son de un sutil rosado, lucen muy delicaditas, me gusta mucho tener plantitas en mi terraza, le dan ese toque de verdor que siempre hace falta.

Sin darme cuenta el tiempo pasó volando entre una cosa y otra, mi hijo adormilado aún pero tocaba asistir al juego y apoyar a su equipo, así que nos alistamos, Sammy quiso quedarse en casa, tenía programada una salida con dos amigas y la mamá de una de ellas les acompañaría, por ello aceptamos, dado que ya conocemos a la señora. Y bueno a ella también le tocaba su salida.

El equipo no tuvo suerte esta vez, perdieron frente a su oponente pero los chicos disfrutaron el juego y es lo importante, una de las cosas que observo y me gusta, es que todos los jóvenes peloteros se conocen y siempre hay camaradería entre ellos, pierdan o ganen, es lo bonito de este deporte, este ambiente es muy positivo.

Soy una orgullosa baseball mom, que disfruta cada partido y mi esposo ni hablar, es un archi fanático del beisbol, crítico pero entusiasta y siempre apoyando a los chicos. Pasamos una mañana estupenda, el beisbol es un deporte que une a las familias venezolanas, presenciar un partido un domingo es un regalo que disfrutamos al máximo, ¡Que viva el beisbol!

En casa, disfrutamos de una rica sopa dominguera, un buen descanso para luego apoyar a mi hijo en la tarde, en realidad orientarlo en una tarea, pues a estas alturas el hace sus cosas, pero me gusta estar allí siempre para mis hijos. Sammy en sus proyectos de crochet, me cuenta que en el liceo tiene amigas con las cuales comparte esta afición, es un arte muy bonito y de hecho les ha permitido incluso vender sus creaciones, lo cual es genial.

Los chicos en el liceo se enfocan en emprendimientos, los proyectos en el quinto año les permiten darlos a conocer, es lindo escucharles hablar de sus proyectos. El próximo año le tocará a Sammy, acá estaremos para apoyarle ¡siempre mamá!. Gracias por tu atención, hasta pronto.

Fotos propias, teléfono Redmi Note11. Isla de Margarita, Venezuela.