Soy profesora de corte y costura en un liceo de mi localidad y después de las vacaciones decembrinas, este lunes 10 enero retomamos las actividades laborales, aunque en mi caso la ausencia fue más prolongada porque a finales de noviembre me diagnosticaron Covid-19 y por este motivo estuve de reposo todo ese tiempo. En esta oportunidad les presento el aula-taller donde trabajo, el cual se ha convertido en uno de mis lugares favoritos, ya que la costura es mi pasión, me gusta lo que hago y lo mejor de todo es que me pagan por hacerlo!

Esta materia contribuye a la formación integral de los alumnos al enseñarles un oficio que le será útil durante toda su vida. Los jóvenes aprenden a desarrollar hábitos, habilidades, destrezas y conocimientos que le facilitan la aplicación de las diferentes técnicas de costura en la ejecución del trabajo.

El aula-taller cuenta con varias máquinas de coser, aquí los alumnos aprenden a utilizar los equipos, materiales y herramientas textiles, siguiendo las normas de seguridad personal e industrial.

Las máquinas collaretera y overlock permiten que los trabajos realizados tengan un acabado más prolijo. Las prendas confeccionadas en el taller quedan con una impecable presentación.

En el área de bordado se realizan las decoraciones finales a los diversos modelos realizados en el aula-taller.

Con las actividades realizadas en el aula-taller de costura se pretende que los alumnos aprendan a valorar la importancia del trabajo y lo asuman como una actividad que dignifica al hombre y le permite producir bienes y servicios necesarios para su vida.

Gracias por acompañarme en este recorrido por mi aula-taller de corte y costura, espero que les haya gustado conocer un poco más de mi trabajo diario, aquí estoy de lunes a viernes desde las 6:50 am hasta la 1:00 pm, enseñándole este bello oficio a todos los jóvenes de mi localidad.