ENCONTRÉ EL CAMINO, ME PERDÍ, Y AHORA ME ENCUENTRO DE NUEVO (Mi historia de fitness y salud)

La vida, que chistoso viaje es definitivamente. Siempre he sido una niña bastante involucrada en una actividad física regular. Desde que era pequeña mis papás siempre se cercioraron de que estuviera inscrita en por lo menos dos deportes y mi nutrición era excelente . Conforme fui creciendo continué con este estilo de vida, pero para ese entonce sya había descubierto un sin fin de comidas chatarras y todos los tipos existentes de panes y azúcares que, de nuevo, aún viviendo con mis papás, eran consumidos de una manera muy controlada.

Para mis 18 años dejé mi casa y me fui de intercambio a Francia en donde descubrí una cantidad de dulces, que yo siendo una adicta al azúcar, no podía significar nada bueno para mi, y así fué. Para mi 5to mes ahí ya había subido 10 kilos. Estaba en shock, triste, pero comprometida a encontrar mi camino de regreso a la vida saludable.

Recorte a las azúcares y las harinas de mi vida, comencé a contar mis calorías para mantener una ingesta saludable , preparaba mis comidas con comida de calidad y adopte unos muy buenos hábitos como, hacer ejercicio diario, uno que había olvidado ya para este punto, tomar té verde, tomar mucha agua, y muchos más.

Me tomó alrededor de un año el crear la versión más saludable de mi misma, una versión antes desconocida para m. Ahora tenía un cuerpo saludable, fuerte y magro, acompañado de una bellísima nutrición y una mente sana. En verdad creí que, después de tanto esfuerzo, sacrificios y largas horas de entrenamientos pasados para poder lograr esto, nunca rebotaría. Pero si lo hice, y vaya que lo hice.

Después de un par de meses con este nuevo cuerpo muchas cosas cambiaron en mi vida, muchas de las cuales le dieron un super giro y me hicieron caer en algo que no había conocido tan de cerca antes, una depresión. Con este estado emocional vino una falta de correcta alimentación enorme, hasta que paró por completo, una falta de ejercicio que, inclusive si lo retomaba mi alimentación era tan mala que no lograba compensar, y con todo esto MUCHÍSIMOS pensamientos poco sanos.

Ya son casi dos años desde la última vez que vi ese cuerpo sano y hoy no deseo nada más que recuperarlo. He querido lograrlo desde hace mucho pero nunca tuve la correcta motivación ni incentivos. La primera vez que comencé esta misión estaba convencida de que lo hacía no porque odiara mi cuerpo sino porque lo amaba y quería ser tan saludable como fuera posible, no para verme de ninguna manera en especial.

Hoy puedo decir que, honestamente, solo quiero estar saludable, no enfermarme tan seguido, disfrutar el hacer ejercicio y correr sin sentir que tengo la peor condición del mundo y estar tan segura de mi misma como pueda. Hoy puedo finalmente decir que estoy haciendo esto porque amo mi cuerpo y a mi, no porque lo odie y me odie. Estoy segura de que puedo retomar el camino y convertirme en una aún más increíble versión de mi misma, y esta vez para siempre.

Mucho Amor,
-Cris