Cerveza de piña artesanal, de forma fácil, con pocos ingredientes, de buen sabor y aroma.

Saludos amigo de las redes.
Hoy te invito a elaborar una sabrosa cerveza de piña para que al final puedas degustar y compartir con tus amigos, seguro el resultado va a encantar a todos los que la prueben. Tiene un sabor muy particular y por supuesto muy diferente a las cervezas comerciales, pero será motivo de mucha conversación cuando estés compartiendo con tus amistades y además no hay nada mejor que un vaso de cerveza bien frio cuando hay calor o sed.

Necesitaremos lo siguiente:
Materiales:
Tabla de picar.
Cuchillo, cuchara tamaño normal y una pequeña (de las que se usa para postre).
Botella de 2 litros de refrescos o gaseosa, bien limpias con sus respectivas tapas (utilicé 3 para esta elaboración).
Jarra con capacidad de 2 litros o más.
Embudo.
Colador.
Materia prima:
Piña mediana.
Levadura en polvo.
Papelón o azúcar morena, en algunas partes le llaman piloncillo, es la caña de azúcar en su procesamiento más básico de deshidratación, por acá los consigo con un peso cercano al medio kilo.
Agua filtrada.

Lo primero a realizar será derretir el papelón o azúcar morena, yo lo coloco en una pequeña olla, con agua que apenas lo rebase, lo dejo en la nevera de un día para otro y se va disolviendo en el agua, si no quieres esperar un día, puedes colocar la olla en la cocina a fuego lento y se irá disolviendo en el agua en la medida que pasen los minutos, no te descuides en la cocina porque se puede quemar o si hierve se puede botar, sólo requiere que esté disuelto en el agua y a temperatura ambiente para su uso.

Hay que limpiar la piña y quitarle la concha o pelarla.

Luego se rebana y corta en pequeños cuadritos para pasarlos por un procesador y cómo resultado tendrás trozos muy pequeños, una piña mediana debería alcanzar para hacer 6 litros de cerveza.


Se distribuye la piña en forma equitativa en las botellas plásticas, a cada botella se le agrega media cucharadita de levadura, también a cada botella se le agrega 5 cucharadas de papelón y se completa con agua, es importante no llenar totalmente la botella, se puede dejar unos 5 o 10 centímetros sin llenar, ya que la fermentación acumulará gases que pueden explotar la botella.

Durante 5 días continuos se tendrá que destapar cada botella y alimentar con 5 cucharadas de papelón cada día, hay que tener mucho cuidado al destapar la botella, yo lo hago muy lentamente, dejando escapar los gases acumulados poco a poco; si el proceso de fermentación está funcionando correctamente la botella casi no se podrá apretar por los gases acumulados, eso indica que el proceso está funcionando correctamente, es importante después de cerrada la botella agitar ligeramente cada botella para que el papelón se distribuya en todo el líquido.
Las botellas deben guardarse a temperatura ambiente en un sitio que no tenga mucha claridad, yo las guardo en uno de los espacios cerrados de la cocina en forma vertical.

Para el sexto día se destapan las botellas pero esta vez se colará el producto para quitar los trozos de piña, ya que sólo nos interesa el líquido, en este momento se alimenta cada botella con 10 cucharadas de papelón. Se vuelven a guardar hasta el día siguiente, el séptimo día ya podemos colocar la cerveza dentro de la nevera.

Es importante aclarar que todos los materiales a usar deben estar completamente limpios, las botellas no deben estar mucho tiempo destapadas para que nuestro producto no tenga ningún tipo de contaminación, el papelón puede conservarse en la nevera, al final de cada botella verás algo blanquesino, no te preocupes, es la levadura que seguramente aumentó por la alimentación recibida.
Si todo se ha hecho cuidadosamente, es el momento de probar nuestra cerveza. El fondo que quede en cada botella es levadura, la puedes conservar en la nevera y usarla para elaborar más cerveza.
Recuerda tener mucho cuidado con las herramientas y materiales que usas, no dejes nada al alcance de los niños.
Espero te motives a hacerlo y salud.