5 HISTORIAS DE ASESINOS SERIALESsteemCreated with Sketch.

in #asesinos7 years ago

Psicópatas, sociópatas, dementes; desde Jack el destripador hasta Zodiaco, pasando por Charles Manson, David Berkowitz, Ted Bundy, etc. Todos ellos han pasado por las puertas de la historia como personas deplorables, lo peor que la sociedad ha tenido. Casi todos hemos oído hablar de esos y muchos otros nombres conocidos, pero hay peores que jamás hemos escuchado. Aquí te mostramos 5 de ellos.

  • LUIS GREGORIO RAMIREZ MAESTRE

Este hombre de nacionalidad colombiana aterrorizo principalmente las comunidades de Valledupar y Barrancabermeja desde 2009 hasta su captura en 2012, siendo esta última localidad la que le daría el apodo de “el monstruo de Tenerife”. hasta el momento de su captura se le atribuían 30 homicidios, todos ellos efectuados a jóvenes mototaxistas de contextura delgada y baja estatura, ya que lógicamente eran mas fáciles de someter. El modus operandi de este asesino era sencillo pero efectivo, una vez escogida la victima solicitaba un servicio hasta un lugar previamente escogido fuera de la localidad para luego asfixiar a la persona una vez llegado al lugar, cuidando de no matarla. Una vez inconsciente la persona este utilizaba cuerdas para atarla de manos y cuello, usualmente a la rama de un árbol de manera que sus piernas quedaran flexionadas para que la persona producto de la fatiga al final no pudiera sostenerse y finalmente se ahorcara. Su condena fue de 34 años.

  • ALEXANDER PICHUSHKIN

Nacido en Rusia el 9 de abril de 1974, fue apodado por la prensa como “el asesino del martillo” debido a que utilizaba tal instrumento para golpear a sus víctimas hasta la muerte. 61 homicidios confirmados entre 1992 y 2007, todos ellos hechos con el fin de completar un tablero de ajedrez de 65 casillas en el que colocaba una moneda por cada una de sus víctimas. El modus operandi era acercarse a sus víctimas, mayoritariamente hombres vagabundos o alcohólicos entre 50 y 70 años, aparentando luto por una mascota fallecida, luego invitaba a las víctimas a beber vodka y una vez que estaban intoxicadas las ataba de manos y golpeaba su cabeza hasta ocasionarles la muerte. Cuando fue capturado confeso que sentía placer sexual al ver a sus víctimas agonizando y que le gustaba el sonido de los cráneos partiéndose. Fue condenado a cadena perpetua.

  • EDMUND KEMPER

Estadounidense, tuvo una infancia conflictiva en la que sus padres reñían constantemente, terminando por divorciarse. Criado por su madre quien no tenía escrúpulos para encerrarlo en el sótano de su casa a modo de castigo, se volvió una persona extremadamente tímida y aislada. Sus primeras fueron sus abuelos, cuando esta tenía 15 años. Fue internado y puesto en libertad al cumplir 21 años. Una vez fuera del hospital psiquiátrico comenzó a asesinar de nuevo hasta que luego de 7 víctimas a las que asesinaba, violaba y después mutilaba; termino por acabar con la vida de su madre. Posteriormente se entregó alegando que su objetivo había sido cumplido.

  • KEITH JESPERSON

El asesino de la cara feliz. Este hombre de Columbia británica fue un camionero conocido por dejar notas escritas y firmadas con caritas felices. Sus principales víctimas eran prostitutas, a las que estrangulaba y cuyos cuerpos dejaba abandonados en algún lugar de la carretera. En su confesión alego que fue perpetrador de 160 homicidios, pero la policía solamente pudo confirmar 8. Fue condenado a 3 cadenas perpetuas.

  • ALBERT FISH

Apodado “el viejo asesino” comenzó sus crímenes en Washington a la edad de 20 años donde su primera víctima fue un niño al que violo y asesino. Con tendencias masoquistas, sádicas, pedófilas y caníbales, sus víctimas eran niños a los que torturaba, asesinaba y luego desmembraba para cocinarlos. Se tiene registro de que torturo al menos a 100 niños de los cuales asesino 15. Fue capturado en 1935 y condenado a la pena de muerte, siendo ejecutado en la silla eléctrica de la cárcel de sing sing el 16 de enero de 1936. Antes de ser electrocutado afirmo emocionado que ese sería el escalofrió que le faltaba por conocer.