Con historia.

Pocas semanas después y por motivo de mi cumpleaños me regaló el juego de cubiertos, para algunos desconcertante ya que no es un obsequio habitual a una joven que no tenia hogar propio, pero para mí significó mucho, su gesto y los cubiertos. En una primera instancia fueron guardados para ocasiones especiales, por ejemplo cuando comían con nosotros personas extrañas o amigos, mas adelante decidí que fueran los de uso diario, así pasaron 41 años y aun están intactos, todos completos ciertamente son de acero inoxidable, de verdad el precio valía la durabilidad que tendrían.

Con ellos ingirió alimentos mi madre que ya no está con nosotros, han pasado por manos muy queridas han acompañado, desayunos, almuerzos y cenas especiales para la familia, sé bien que son “objetos” pero a medida que pasa el tiempo agradezco que estén en casa y les tengo de alguna manera afecto. Hemos tenido otros juegos de cubiertos los cuales se han deteriorado, desmejorado, extraviado pero ellos allí…incólumes, 41 años después…siguen teniendo mucha historia.

Saludos amiga @aplausos
Muy interesante historia detrás de éste juego de cubiertos, la verdad son muy bonitos, y diferentes a los que comúnmente estamos acostumbrados a ver.
Gracias por unirse al concurso.
Participante #2