Por estas tierras ha hecho mucho calor. Claro, no me quejo de eso, porque he visto que las lluvias han causado destragos en muchos estados del país; entonces, creo que se me hace más fácil lidiar con el sol, antes que sufrir la angustia que generan las lluvias desproporcionadas. Un abrazo, amiga mía.
Jajaja, no me importa el calor del sol si consigo donde refugiarme con un buen aire acondicionado, en vista que no tengo el beneficio de la electricidad pues prefiero preocuparme por lo que tengo. Lo que tengo es demasiado calor.
Sin menospreciar lo que está sucediendo en muchos estados de mi hermoso país, no puedo quejarme de lo que no tengo.
Los desastres naturales están lejos de poder ser solucionados por una persona, ya que son causados gracias al descuido de todos nosotros, los seres humanos en general.
El hecho que yo sufra tanto porque sencillamente los que están encargados de solucionar el problema no lo hacen, me da paso a sentir tristeza también por todas estas personas que han sucumbido mortalmente ante la ola de calor. Incluso amigos míos los he sabido muertos gracias al aumento de la temperatura ambiental.
No creo que debemos esperar a estar hasta el cuello con tanta tragedia para salir y opinar sobre lo que se sufre con tanto calor.
Por lo pronto, creo que si muero por estar todos los días y noches dando vueltas como un pollo en el horno, sepan que estas fueron mis últimas quejas. Y si no sucumbo, pues me leerán escribiendo más sobre el tormentoso calor y mi falta de electricidad en casa para usar un aire acondicionado.
Gracias mi querida sol pero tus palabras muy lejos de consolarme.