The diary game. 8/04/2025. Le sonrío a la vida.

Querido diario, cada quien elige como quiere vivir, yo decidí hace mucho, que quiero hacerlo con mucha alegría a mi alrededor, con esa magia bonita que contagie. Cuando llego a ambientes donde no me siento cómoda trato de salir de allí rápido, no quiero gente tóxica en mi círculo, en este momento de mi vida amo aún más mi tranquilidad.

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La idea de llenarme de todos esos problemas de otros como sucedía antes por mi trabajo, no me entusiasma para nada. Pero nunca falta quien esté buscando auxilio y que en medio de las conversas se desahogue o se queje por todo. Ironías de la vida, aquello que tratamos de evadir a veces pareciera acercarse más, entonces sólo queda aprender a convivir.

Las circunstancias han cambiado obviamente, dado el contexto histórico que se vive (crisis política-económica y sus derivados) y la gente pareciera estar de toquecito, es decir, se alteran de la nada, es común ver a muchos que en medio de conversas gritan y una se queda pensando: ¿Y qué pasó aquí? pero bueno, hasta les disculpo pero no es la actitud, sin embargo cada quien elige como quiere vivir o ser.

La cuestión es que en circunstancias apremiantes tenemos que tratar de buscar salida o solución. Mis plantas son uno de esos elementos de mi entorno que he convertido en un factor catalizador o transformador, es decir, en mi caso cuidarlas, verlas cada mañana brillar, admirar el florecimiento como el caso de estas preciosas "Siempre vivas" me alegra el día y siempre sonrío al verlas.

Es mágico su efecto en mi, las he colocado en un lugar estratégico que me permita visualizarlas rapidamente, el que ama a las plantas lo puede entender. Cada día trato de emplear mi tiempo en actividades que me llenen e incentiven mi entusiasmo, canalizando así cualquier efecto negativo en mi vida diaria.

En medio de la cotidianidad aproveché de salir un rato con mi hijo pues tenía ganas de comer sandwichs, empalagarme con un rico postre, así que salimos a la panadería del pueblo, compramos panes y pedazos de torta para compartir. Me encantan los dulces, mi piquito de playa y yo, ja, ja, ja.

De regreso paramos un rato en la playa, este día estuvo un poco nublado pero el ambiente marino siempre es lindo y conquista, en compañía de mi hijo siempre soy feliz. Aprovecho estos momentos para estrechar lazos, sacarle sonrisas, le ha tocado vivir una etapa dificil pero el ha sabido enfrentarle con valentía.

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_{Simplemente feliz.}

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