Mi día comienza con mi oración devocional para fortalecer mi bienestar espiritual, en la que puedo agradecer a Dios por un nuevo día, por mi salud y por mi familia.

Asimismo, aprovecho este devocional para interceder ante Dios por la situación política, social, económica y espiritual de mi país, Venezuela, ya que la crisis económica y política se ha agravado, afectando gravemente la situación social de las familias venezolanas.

Al finalizar mi oración devocional, salí a mi jardín para aprovechar la frescura de la mañana y realizar mi recorrido habitual por cada rincón.

Comencé mi recorrido observando las plantas de chile recién plantadas. Con las lluvias, hice un semillero y las plantas empezaron a brotar. Esto me permitió plantarlas en mi huerto cerca de la planta de orégano, ya que tanto el chile como el orégano son esenciales para dar buen sabor a los platillos.

Las plantas de chile tenían solo dos semanas de haber sido trasplantadas al huerto, y espero que con las lluvias crezcan sin problemas y pueda disfrutar de su cosecha.

Continué mi recorrido por la zona donde recientemente sembré yuca, y las hojas ya están brotando del tallo. Esto indica que con las lluvias, estas plantas deberían prosperar y debería tener cosechas para enero de 2026.

La yuca tiene una vida media de seis meses, así que hay que tener paciencia y regarla constantemente o aprovechar el agua del cielo, que es más beneficiosa para la naturaleza.

Después de terminar mi recorrido por el jardín, aproveché para darle mantenimiento a la jaula de los loros, un trabajo diario. Estos animalitos mordisquean mucho la comida y ensucian más de lo que comen. Hay que cambiarles el agua a diario.

Llegó el mediodía y descansé hasta las 2 p. m.

Por la tarde, trabajé en mi computadora, haciendo publicaciones y revisando información en varias plataformas de redes sociales, hasta que pude dormir un poco por la noche, lo cual fue importante para el descanso de mi cuerpo y mi mente.